Trece fichas del primer equipo del Girona son suficientes para ganar en Getafe
Ferran Ruiz, uno de los implicados en la presunta difusión de un vídeo de contenido sexual de una menor, debuta como rojiblanco
GIRONAEs inexplicable lo que le está sucediendo al Girona en el apartado médico. Una decena de bajas día sí, día también, a las que se sumó Krejci, a última hora. Ni Gazzaniga se ahorra el trance: el argentino entró en pánico cuando, despejando un balón, en una acción que a lo largo de su trayectoria habrá repetido miles y miles de veces, estuvo a punto de romperse. Por ahora, nadie que vista la camiseta rojiblanca está libre de ser el próximo en caer. Y convivir en estas condiciones, psicológicamente, es terrible. El equipo se aisló de todas las circunstancias negativas que le rodeaban y obtuvo un triunfo muy necesario en Getafe, gracias a un gol de Yangel Herrera (0-1).
De hecho, en el banquillo del Coliseum, Stuani era el único futbolista de campo de la primera plantilla. El otro veterano era Pau López. En total sólo trece fichas. Junto a Stuani y el portero gerundense, siete futbolistas del filial. Enanos a los que Míchel debe recurrir. Como Ferran Ruiz, uno de los implicados en la presunta difusión de un vídeo de contenido sexual de una menor durante su etapa en el Madrid. El garrochino, muy criticado en las redes sociales, disputó en los últimos 25 minutos. Míchel, que no tiene reparos en reconocer que este es el momento más complicado de su etapa en los banquillos, porque nunca se ha encontrado nada ni mínimamente parecido, estaba deseando que llegara ese paro de selecciones. Él y todo el vestuario, claro.
Mejor hacerlo con tres puntos que con las manos vacías. Una victoria sudada, sufrida y merecida que, sumada a la de la semana pasada ante el Leganés, permite dar un salto importante en la clasificación, ya con dieciocho puntos en el bolsillo. En los momentos de mayor dificultad, la plantilla, que también deseaba olvidar la paliza europea encajada en Eindhoven, siempre saca fuerzas de las que no las hay. Es un rasgo distintivo de los gerundenses que, sin hacer un buen fútbol, supieron competir.
Dos estilos opuestos
Qué mejor plan puede haber un domingo por la tarde que visitar Getafe, un lugar en el que habitualmente pasan pocas cosas, y las que pasan no suelen ser buenas. El estilo de los de Bordalás tampoco cambia con el paso de los años: un juego lleno de pequeñas trincheras, lleno de pequeñas peleas y de juego agresivo, lejos de cualquier tipo de buen paladar. Éstos son partidos duros para el espectador y para el jugador, marcados por las entradas, las interrupciones y las luchas cuerpo a cuerpo.
El Girona se vio forzado a jugar a otra cosa a la que está acostumbrado. Tampoco es que este curso esté brillante, pero es que no pudo ni intentarlo. Le bastó siendo práctico, defendiendo fuerte en su área y aprovechando la única gran ocasión que tuvo, al límite del descanso: un centro de Bryan Gil que Yangel Herrera, entrando desde atrás, cabeceó al fondo de la red. Instantes antes, Martínez Munuera señaló un penalti en contra por una falta de Oriol Romeu que el VAR hizo bien en corregir, porque estaba fuera del área. Al menos esto les sonrió a su favor.
Getafe 0-1 Girona
- Getafe: Soria, Nyom (Sola, 64'), Alderete, Duarte, Rico, Arambarri, Iglesias, Milla, Yellu (Bertug, 46'), Pérez (Álvaro, 64') y Uche (Aleñá, 85'). Entrenador: José Bordalás.
- Gerona: Gazzaniga, Arnau, David López, Juanpe, Blind, Romeo, Yangel Herrera (Selvi, 73'), Van de Beek (Ferran, 73'), Bryan (Minsu, 89'), Miguel y Miosvki (Stuani, 73') ). Entrenador: Míchel Sánchez.
- Goles: 0-1 Yangel Herrera (42').
- Árbitro: Martínez Munuera (Comité Valenciano).
- Tarjetas amarillas: Van de Beek (34'), Rico (38'), Romeo (39'), Yangel Herrera (40'), Sola (87') y Bertug (92').
- Tarjetas rojas: Ninguna.
- Estadio: Coliseum, 10.923 espectadores.