Juego de sillas en el Espanyol antes de empezar la Liga
Alan Pace, que se sentará en el palco en el debut perico en la Liga, está pendiente de que el CSD autorice la compraventa del club
BarcelonaEl 14 de julio, el Espanyol anunció que Rastar había llegado a un acuerdo con Velocity Sport Limited (VSL) por venderle el club a cambio de 130 millones de euros. Dos semanas después, los accionistas del conglomerado chino aceptaron en junta de accionistas el cambio de manos, que incluye un 16,45% de las acciones de VSL, que controla la entidad perica y el Burnley inglés, ambos equipos bajo el paraguas del holding empresarial dirigido por Alan Pace.
Pero de momento, VSL aún no opera como máximo accionista del Espanyol porque está pendiente de que el Consejo Superior de Deportes (CSD) dé luz verde a la operación de compraventa, y Mao Ye, CEO perico y la mano derecha de Chen Yansheng en Barcelona, sigue siendo la principal cara visible de la entidad. Esto quiere decir que el directivo chino presidirá este domingo el palco del RCDE Stadium en el debut del Espanyol en la Liga, frente al Atlético de Madrid (21.30 h, Movistar+). Como ocurrió en la final de la Copa Catalunya, unas filas más atrás se sentará Alan Pace, que según ha podido saber el ARA acudirá al primer partido oficial de la temporada de los blanquiazules.
Son días de impasse en las oficinas de Cornellà, desde donde se espera que la resolución del CSD llegue pronto. Una vez se solucionen estas cuestiones burocráticas, habituales en una operación de esa envergadura, Pace asumirá las riendas del club y ya podrá dar una rueda de prensa para presentarse en sociedad y, en su caso, convocar a una junta de accionistas para nombrar un consejo de administración y un nuevo presidente que represente al nuevo accionariado. También podrá presidir el palco del estadio.
Un dueño más cercano
De todos modos, desde que se anunció el acuerdo con Rastar, VSL, a través de su equipo y de consultores extenso, está estudiando al milímetro el club para conocer su idiosincrasia y optimizar su funcionamiento a todos los niveles en cuanto pueda. Por su parte, Alan Pace se trasladó unos días a Barcelona, una ciudad que le tiene enamorado, por estar pendiente del día a día de la entidad, todavía dirigida por el conglomerado chino. "Es su forma de trabajar. Cuando compró Burnley, fue a vivir a Inglaterra con su familia", comenta un viejo conocido del nuevo propietario del Espanyol, que habla un buen castellano y se dirigió por primera vez a los aficionados pericos, a través de las redes, en catalán. En este sentido, será un dueño mucho más cercano que Chen Yansheng, que no pisa a Catalunya desde agosto del 2022.
El empresario estadounidense se ha reunido ya con los capitanes –le dijo a Manolo González que estaría encima del equipo y que a menudo le preguntaría por el sistema de juego–, y se ha visto varias veces con Mao Ye y el director deportivo Fran Garagarza, que le llevó con su coche a la final de la Copa Catalunya. Allí, en Sabadell, hizo su primera aparición pública como nuevo propietario del Espanyol acompañado de Bradley Spiby, hombre de confianza de Pace y un profesional de las finanzas aplicadas en el deporte que tendrá un peso importante en la reformulación de la entidad. También vio en directo el último partido de pretemporada del equipo perico, en el campo del Newcastle. Al día siguiente, Mao y Garagarza acudieron a Turf Moor con motivo del Burnley-Lazio, y se sentaron en el palco... que presidía Pace.
Frenada en el mercado de fichajes
A la espera de conocer si los planes de VSL en el Espanyol afectan a la actual estructura de la dirección deportiva, está garantizado que Garagarza liderará el mercado de verano que finaliza dentro de dos semanas. Es él el que renovó Manolo González y el que ha fichado a Terrats, Hugo Pérez –cedido al Huesca–, Marcos Fernández, Dmitrovic, Kike García, Miguel Rubio, Salinas, Roberto y Tyrhys Dolan, la única incorporación realizada más allá del 14 de julio. "Hay posiciones que claramente debemos reforzar, pero hay cosas que no dependen de nosotros. Tenemos competencia y una situación económica que no es fácil", se justificó la semana pasada un Fran Garagarza, condicionado por el fair play, que quiere firmar entre tres y cuatro jugadores. Son prioritarios un mediocentro y otro defensa central, para sustituir a Urko González y Kumbulla.
En caso de llegar el visto bueno por parte del CSD en los próximos días, ni el club se desviará de los objetivos y de la planificación prevista, ni Alan Pace podrá modificar drásticamente el límite salarial –sólo la entrada de un gran patrocinador lo permitiría– de un Espanyol que días antes de su debut en la Liga.