La dependencia de Rusia pone el diésel al mismo precio que la gasolina
El encarecimiento del gasóleo se come la diferencia de impuestos entre los dos carburantes
BarcelonaEl gráfico que acompaña esta información está claro. El litro de gasóleo y el de gasolina prácticamente cuestan lo mismo en las gasolineras, lo que no había pasado nunca. Había un factor clave para que el diésel siempre fuera más barato que la gasolina: la fiscalidad. El IVA es igual para los dos carburantes, el 21%, y por lo tanto no afecta al precio. Pero el impuesto de hidrocarburos sobre los dos combustibles sí que es diferente: 379 euros por cada 1.000 litros de gasóleo, pero 472 euros para la misma cantidad de gasolina de 95 octanos.
Esta diferencia fiscal hacía que incluso en momentos en los que el gasóleo en los mercados mayoristas era más caro que la gasolina, una vez aplicados los impuestos fuera más barato en los surtidores de las gasolineras, explica Manel Montero, director general de grupo Moure, uno de los principales operadores de gasolineras de bajo coste.
De hecho, desde el inicio de este año, la gasolina de 95 octanos se ha encarecido un 22,8%, mientras que el gasóleo lo ha hecho un 33,4%. “La subida más rápida de los carburantes que he visto nunca”, asegura Montero. El caso es que el hecho de que se haya disparado más el precio del gasóleo que el de la gasolina se ha comido la ventaja fiscal que tenía el diésel . “Hay una tensión brutal en el mercado europeo del diésel ”, explican fuentes del sector petrolero español.
Este aumento más importante del precio del gasóleo va directamente unido al mercado europeo y, especialmente, a la dependencia energética de Rusia por parte de Alemania, explican fuentes del sector. Destacan que Alemania –y también otros países del centro y norte de Europa– no solo compra a Rusia mucho gas y mucho crudo, sino también algunos productos refinados, especialmente gasóleo. La invasión de Ucrania, con los embargos y la incertidumbre que ha provocado, ha trastornado los mercados energéticos europeos con el encarecimiento del gas y el petróleo, pero también otros productos como el diésel.
Algunos números dan una visión de este fenómeno. El precio del litro de gasóleo en España la última semana era de 1,79 euros. En Alemania subió hasta los 2,17 euros, según los datos del Boletín petrolero de la Unión Europea. Otro hecho muestra mejor la gran dependencia de Alemania del mercado ruso: si en España el precio del gasóleo ha subido un 22,8% desde principio de año, en Alemania lo ha hecho un 60%. Y, para evitar los enmascaramientos que pueden provocar los impuestos, el precio del litro de gasóleo en Alemania sin impuestos la última semana era de 1,57 euros el litro, un 84% superior al de principios de 2022.
Es decir, el encarecimiento de los carburantes refleja el aumento del precio del petróleo, pero, además, en el caso del diésel hay un efecto añadido que es la importación del producto refinado desde Rusia. Un producto que, además, tiene una parte de la demanda bastante inelástica, que es la del sector del transporte.
Estas mismas fuentes del sector explican que la situación en España es muy diferente de la del centro de Europa. “Ser una isla energética tiene algunas desventajas, pero también alguna ventaja”, dicen. Manel Montero reconoce que el producto se ha encarecido y, además, sufre mucha volatilidad. “Tendríamos que cambiar los precios del surtidor cinco veces al día”, explica. Pero asegura que en ningún momento ha habido desabastecimiento. Sí que ha cambiado la manera de comprar el gasóleo a los distribuidores. Antes se hacía día a día, pero ahora, con esta volatilidad de precios, se tienen que buscar contratos a más largo plazo, de mínimo un mes, indica el director general de Moure.
Seguridad de suministro
Fuentes del sector petrolero aseguran que en España, por el sistema de refinamiento que hay, está más que asegurado el abastecimiento. “Hay una gran tensión [de abastecimiento] en Europa, pero España se librará de ello”, aseguran estas fuentes.
Montero lo corrobora. “No hay ningún problema de desabastecimiento”, explica, y además recuerda que España dispone de sus reservas Cores. “Las estaciones de servicio no tienen ningún problema” para obtener gasóleo, explica el director general de Moure, a pesar de que indica que entre los distribuidores, por la incertidumbre del momento, sí que ha habido un aumento de la demanda de diésel . “Los distribuidores hacen estos movimientos porque hay miedo”, asegura.
Manel Montero también explica que en la actual situación las gasolineras han tenido que reducir los márgenes, pero, aun así, ya se nota menos demanda de carburantes. “Coger el coche empieza a ser un lujo”, recalca.