Los precios se moderan en mayo a la espera de la decisión del BCE
El gobierno español mantiene por el momento la reducción del IVA a los alimentos
BarcelonaLa inflación se ha moderado a la mitad este mes de mayo en España después de un trimestre de incrementos a un ritmo muy superior, según datos avanzados del índice de precios al consumo (IPC, el indicador que mide el coste de la vida) publicadas este jueves por el Instituto Nacional de Estadística. Pese a la moderación, la diferencia con los precios de hace un año sigue por encima de los objetivos que se marca el Banco Central Europeo (BCE), que la próxima semana debe decidir si empieza a recortar el precio del dinero.
Así, el coste de la vida para las familias españolas ha crecido un 0,3% en relación al mes pasado. Se trata de la menor subida de los últimos tres meses. Pese al recorte de los precios, la inflación interanual en el Estado se situó en el 3,6% (tres décimas por encima de la registrada el mes anterior).
Este incremento se debe al llamado efecto base, un fenómeno estadístico provocado porque en mayo del pasado año los precios de los carburantes cayeron a un ritmo más fuerte que este mes y, también, por el incremento del precio de la electricidad este mayo, cuando un año atrás disminuyó . Esto hace que, aunque el IPC ha subido menos que el mes pasado, cuando se compara con el mismo mes del pasado año haya un incremento. Este efecto también se produjo, pero al revés, hace aproximadamente un año: dado que los precios se dispararon en el 2022 con la invasión rusa de Ucrania, en el 2023 parecía que se habían moderado de repente si se hacía una comparación anual, cuando en realidad mantenían las subidas a un ritmo bastante intenso.
La inflación subyacente –que no tiene en cuenta productos volátiles como la energía y los alimentos frescos– ha seguido la tendencia a la moderación y se ha situado en un 3% anual, una décima por encima del dato del mes de abril y, de nuevo, por debajo del IPC general.
Dado que las cifras publicadas este jueves por el INE son un anticipo (los datos ampliados y desglosados por autonomías se conocerán el 13 de junio), no incluyen con precisión cuáles son las partidas de la cesta de la compra que más se han encarecido. Ante esta situación, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha decidido que espera a tener más datos para determinar si prorroga la reducción del IVA a los alimentos, una medida tomada en diciembre de 2022 para paliar los efectos de la inflación. "Tenemos que ir al por menor específico para saber qué está pasando con los alimentos en concreto, y ese detalle lo tendremos en unas semanas", ha declarado. El pasado marzo el gobierno ya anuló el recorte del IVA en el recibo de la luz.
Reunión del BCE la próxima semana
La evolución de la inflación en el conjunto de países de la zona euro tendrá un impacto directo sobre la reunión del consejo de gobierno del BCE el jueves de la próxima semana. En el encuentro, el organismo monetario podría decidir recortar los tipos de interés por primera vez desde febrero de 2016 si se confirma la moderación de precios en Europa.
Siguiendo la ortodoxia económica, el BCE aprobó una subida de los tipos básicos de medio punto porcentual en julio de 2022, después de más de seis años con el precio del dinero al 0%. Posteriormente, fue incrementándolos hasta el 4,5% actual, siguiendo la estela de la Reserva Federal (Fed, el banco central de Estados Unidos) y otros bancos centrales de varios países.
Los tipos básicos son el interés que cobran los bancos centrales a los bancos comerciales por prestarles dinero. Con un encarecimiento de este interés, a las entidades financieras les resulta más caro obtener liquidez del BCE y, por tanto, repercuten este encarecimiento en los créditos que dan a los clientes. Así, familias y empresas deben pagar intereses más altos por sus préstamos (por ejemplo, hipotecas), lo que reduce el consumo y la inversión en la economía, lo que en teoría disminuye los precios.
Con el estallido de la guerra en Ucrania, la escasez de materias primas después de la pandemia y los cuellos de botella en las cadenas industriales, en el 2022 los precios se dispararon en Europa, pero últimamente se han ido desinflante y la inflación vuelve a acercarse al 2% en la zona euro (en abril fue del 2,4%), que es la cifra que busca alcanzar a largo plazo el BCE. Esto hace pensar, cómo han dejado entrever varios altos cargos de la institución –incluida la presidenta, Christine Lagarde– en los últimos meses, que el encuentro del próximo jueves podría significar un primer recorte de los tipos ahora que la inflación va camino de alcanzar cifras más bajas.
España fue una de las economías europeas con una menor inflación durante el 2022 y buena parte del 2023, gracias a la menor dependencia del gas y el petróleo rusos. Sin embargo, la mala situación económica de los países del centro y norte del continente, sobre todo Alemania, ha castigado su demanda interna y, como es habitual cuando hay un frenazo de la actividad, ha empujado a la baja los precios , por lo que actualmente la inflación española supera la media de la eurozona.