El MWC exigirá tests negativos del covid cada 72 horas a los asistentes
GSMA espera unos 50.000 asistentes, la mitad que en la última edición
BarcelonaGSMA, organizadora del Mobile World Congress (MWC), espera entre 45.000 y 50.000 asistentes en la edición del 2021, que tendrá lugar en el recinto ferial de Gran Via de l'Hospitalet de Llobregat entre el 28 de junio y el 1 de julio, después de que la edición del 2020 se suspendiera por culpa de la pandemia. Los organizadores de la principal feria de móviles han anunciado este lunes las medidas de seguridad sanitaria que se seguirán. Si se logra el objetivo, los visitantes serían aproximadamente la mitad de los que hubo en la edición del 2019.
Los asistentes se tendrán que bajar una aplicación móvil y, además, tendrán que pasar un test negativo cada 72 horas. Fuentes de la patronal GSMA han informado de que tienen preparado un plan de salud y seguridad, que cuenta con el aval de las autoridades sanitarias catalanas, para hacer posible la celebración este año del salón sin riesgo de contagio, a pesar de la crisis de la pandemia.
Además de los tests negativos, los asistentes tendrán que llevar mascarilla FFP2 y seguir otros protocolos de seguridad, como por ejemplo mantener la distancia, higiene constante de manos o tomarse la temperatura.
"Sabemos lo importante que es el MWC para Barcelona, España y para la GSMA", han indicado los organizadores del MWC, que quieren que la edición del 2021 sea un símbolo de la recuperación. El Mobile contará con varios centros, gestionados por la propia organización de la feria y un socio del ámbito médico que se anunciará próximamente, al que los participantes tendrán que dirigirse para hacerse pruebas cada 72 horas.
Para los asistentes que lleguen en avión se exigirá el test negativo antes de viajar, mientras que los que lleguen en tren o coche tendrán que dirigirse a los centros de pruebas del Mobile para comprobar su estado de salud. En el recinto habrá circuitos de entrada y de salida, se fomentará un entorno sin contacto, se rediseñarán espacios como los restaurantes para asegurar el distanciamiento social, se controlará el flujo y la densidad de personas y se garantizará una ventilación correcta. También aumentará el personal médico en el recinto para hacer evaluaciones, administrar PCRs o pruebas rápidas y coordinarse con las autoridades sanitarias. Los datos de rastreo de contactos también se compartirán con las autoridades sanitarias, si hace falta. La organización ha recordado que hace dos semanas se celebró el Mobile de Shanghai, con 17.000 asistentes y sin incidentes.