Energia

Ribera abre la puerta a crear una eléctrica pública y modificar la tarifa de la luz

La vicepresidenta quita hierro al impacto del mercado mayorista en el recibo

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La ministra  De Transició Ecològica, Teresa Ribera, ayer 
 a La Moncloa.

El impacto en el recibo de los consumidores de precios históricamente altos de la electricidad en el mercado mayorista "no es tan aparatoso", según la vicepresidenta tercera del gobierno español y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. La ministra, en una entrevista en la SER, ha augurado un periodo largo de precios altos de la electricidad y se ha lavado las manos: obedece a factores "que no dependen" del gobierno español, como el precio del gas y el encarecimiento de los derechos de emisión de CO 2.

Sin embargo, la ministra ha abierto la puerta a reformas de la tarifa y, por primera vez, también ha aceptado la posibilidad de crear una empresa pública que aglutine las centrales hidráulicas; una medida aplaudida por sus socios de gobierno de Unidas Podemos. "Hemos hecho una apuesta de gobierno, de los partidos de la coalición, muy importante, para dar cobertura al máximo a los consumidores vulnerables y también a los consumidores medios, y yo creo que esto es muy relevante, incluida la modificación de las reglas de mercado, de generación", ha dicho la ministra, que ha apuntado a la posibilidad de un nuevo modelo concesional o una empresa pública para gestionar las centrales hidráulicas "a medida que se vayan liberando las concesiones".

A pesar de esto, la ministra ha censurado la propuesta del portavoz de Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, de promover protestas en la calle contra la subida de la luz y el "saqueo" de las eléctricas. La ministra ha indicado que la subida del precio de la energía eléctrica "no se resuelve con una movilización en la calle" y que el "desafío" es "encontrar soluciones". Recordó que el gobierno ya ha rebajado el IVA, ha suspendido el impuesto de la generación, ha dado el "máximo" de cobertura a los consumidores vulnerables y tiene en tramitación el proyecto para acabar con los llamados "beneficios caídos del cielo".

Polémica con Bruselas

La titular de Transición Ecológica explicó que la Comisión Europea ha respondido a su petición de reformar el sistema del mercado eléctrico y ha rechazado cambiarlo. Las instituciones europeas lo consideran "eficiente y simple". En cambio, Ribera ha insistido en que "no es razonable". La respuesta de Bruselas ha llegado hoy por boca de la portavoz de la Comisión, Vivian Loonela, que ha defendido el actual sistema porque garantiza un suministro "seguro y asequible" de energía de la forma más económica.

La portavoz de la CE ha asegurado que las reglas actuales y las infraestructuras transfronterizas (las interconexiones) de la UE permiten vender a un país energía producida en otro, lo que "crea competencia y mantiene los precios bajo control". Además, aseguró que las normas comunitarias "crean señales para reconducir las inversiones hacia tecnologías nuevas y flexibles que apoyan la transición hacia la neutralidad climática", en una velada alusión a la intención de Bruselas de no intervenir en la escalada del precio de los derechos de emisión de CO₂, que es uno de los factores que impulsan al alza los precios de la electricidad.

Las peticiones de cambiar el modelo de tarifa se suceden. Miércoles fueron las grandes eléctricas, y hoy el sindicato UGT y también Foment del Treball lo han pedido. La patronal que preside Josep Sánchez Llibre quiere un nuevo sistema de funcionamiento del mercado eléctrico, al tiempo que pide que la rebaja fiscal de la electricidad sea permanente.

Foment abona la tesis de que hay que acabar con el sistema marginalista del mercado eléctrico, que encarece el precio de la producción de energías baratas como las renovables o la hidráulica. "Hay que analizar la modificación del sistema actual para establecer un sistema diferenciado de precios para cada tecnología de producción", indica la patronal.

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