La UE debate cómo independizarse del gas ruso
Los veintisiete líderes abordan las consecuencias y respuestas de la crisis ucraniana para Europa
BruselasUna cumbre europea en la francesa no podía ser más oportuna. Francia es tradicionalmente la voz que dentro del Consejo Europeo empuja por una Europa más soberana, más autónoma, con mayor capacidad geopolítica y estratégica. Y este jueves en Versalles el presidente galo, Emmanuel Macron, encontrará el momento idóneo para afianzar este mensaje. La guerra que Putin ha comenzado en Ucrania ha hecho que la Unión Europea gane de repente conciencia de que debe adquirir más soberanía en todos los sentidos. Ante todo en el ámbito energético, pero también en el defensivo, el industrial y el económico. De todo ello debatirán este jueves y viernes los veintisiete líderes europeos reunidos en la ciudad francesa en una cumbre que vendrá marcada por el debate sobre cómo independizarse del gas ruso, pero también sobre qué mensaje enviar a Ucrania ante sus intensos llamamientos a entrar en el club comunitario.
La reunión arranca por la tarde con una agenda centrada en abordar la situación en Ucrania y justo después de haber acordado un nuevo paquete de sanciones que suman otros 14 oligarcas en la lista de castigados. La UE también sanciona a 146 miembros del Consejo de la Federación de Rusia, que ratificaron el llamado Tratado de amistad, cooperación y asistencia mutua entre la Federación de Rusia y la República Popular de Donetsk y Lugansk. En total, la UE ha castigado a 862 personas y 53 entidades. También se han excluido tres bancos bielorrusos del Swift y se ha extendido el embargo a la exportación de tecnologías para el sector marítimo. Y los líderes están dispuestos a ir aún más allá, como avisan fuentes europeas y diplomáticas, que resaltan cómo la UE está liderando el frente occidental en este ámbito aunque no se haya sumado al veto a las compras de petróleo, gas y carbón rusos anunciado por Estados Unidos y Reino Unido.
Precisamente si no se han sumado es porque la dependencia energética de Europa respecto a Rusia es mucho mayor que la de estos dos países. Y como reducir esta dependencia será uno de los grandes debates de esta cumbre informal. Después de que la Comisión Europea haya presentado un plan de choque en el que asegura que la UE puede reducir en dos tercios esta dependencia este mismo año, los líderes europeos abordarán el cómo y el cuándo debe llevarse a cabo este proceso. Fuentes europeas señalan que existe consenso en la necesidad de caminar en esa dirección tanto a través de la transición energética hacia la descarbonización como de la diversificación de proveedores energéticos y fuentes de energía, como la apuesta por el gas licuado. Sin embargo, las mismas voces admiten que es difícil fijar una fecha común de horizonte para este hito por las situaciones de partida en este ámbito. Hungría, por ejemplo, ya ha rechazado abiertamente cualquier represalia en Rusia a nivel energético, porque depende de sus combustibles en un 90%.
Ahora bien, sobre cómo mitigar el impacto que ya lleva días en la factura de la luz, hay muchas opciones sobre la mesa aún por activar, pero la predisposición en Europa es mucho mayor que cuando España reclamó por primera vez una compra común de gas, una reserva estratégica o revisar el cálculo del precio de la luz. Los líderes hablarán de ello, pero no llegarán a ningún acuerdo al respecto sino que esperan propuestas más concretas de la Comisión Europea de cara a la cumbre de finales de mes en Bruselas, cuando Madrid confía en que se llegue a un acuerdo más específico para incluso, desvincular el precio del gas del de la luz.
Más inversión en defensa
El otro gran compromiso que los líderes sellarán es el de una mayor inversión en defensa de todo el bloque comunitario, un compromiso político que llegará después de que la UE haya anunciado por primera vez la financiación de armas para el ejército ucraniano con fondos comunes. Según el borrador de la declaración que prevén emitir, "la agresión rusa constituye un cambio tectónico en la historia europea" y por eso es necesario que Europa se haga más responsable de su seguridad y avance hacia la construcción de más soberanía. Pero para invertir más en defensa y en paliar las consecuencias energéticas de la guerra se necesita dinero, un dinero que, según París, puede conseguirse con una nueva emisión de deuda como la del fondo de recuperación antipandemia. Sin embargo, la propuesta no ha sido bien recibida ni en Bruselas ni en otras capitales, que apuestan por enfocar los planes de reformas en esta línea.
Por último, uno de los puntos en los que puede haber más debate político es qué respuesta dar a la demanda ucraniana de entrar en la UE. Fuentes comunitarias y diplomáticas recuerdan que se trata de un proceso largo y muy complicado que requiere también responsabilidad por parte del país que quiere ser candidato en términos económicos, legislativos y administrativos. No hay consenso todavía en este ámbito y habrá que ver qué fórmula encuentran los líderes para no alentar a la ciudadanía de un país en guerra.