El abogado de Britney Spears renuncia a defenderla después de ser acusado de haberse hecho millonario con su caso
Samuel Ingham ha ejercido de letrado de la artista desde 2008, cuando ella empezó a ser tutelada por su padre
BarcelonaSamuel Ingham, el abogado designado por el Tribunal de Los Angeles para representar los intereses de Britney Spears, ha solicitado este martes retirarse de la polémica tutela legal que controla la vida de la artista desde hace 13 años. Ingham ha ejercido de abogado de Spears desde 2008, a pesar de que su tarea se hubiera puesto en entredicho, sobre todo después de que la artista dijera en su última declaración que nunca supo que tenía derecho a pedir la finalización de la tutela y que no la dejaba hablar en contra de esta tutela. "He estado hablando con él unas tres veces a la semana. Hemos creado una especie de relación, pero realmente no he tenido la oportunidad de elegir personalmente a mi propio abogado. Y me gustaría poder hacerlo", dijo Spears en su mediática declaración del 23 de junio.
Ahora, la jueza que supervisa la tutela legal, Brenda Penny, tendrá que nombrar a un nuevo abogado o dar la posibilidad a Spears de que lo elija ella misma. No es la única retirada de la tutela legal después del testimonio del artista, puesto que el fondo de inversión que supervisaba el patrimonio de Spears, Bessemer Trust, también ha pedido apartarse de la tutela después de afirmar que "respeta" los deseos de la cantante. Y Larry Rudolph, el representante artístico de Britney Spears desde hace veinte años, ha roto su contrato con la cantante al reconocer que la voluntad de la artista es retirarse de la industria de la música. "Esta tutela está pagando el sueldo de mucha gente, estoy harta" fue uno de los argumentos con los que Spears pidió el fin de la tutela.
A pesar de la insistencia de la artista, su padre, Jamie Spears, no ha formalizado nunca la petición para poner fin a este mecanismo legal que controla la vida personal y las finanzas de la intérprete de Toxic. Según una exclusiva del periódico The New York Times, el letrado que ahora se retirará ha ganado 2,5 millones de euros al cambio actual, desde 2008, con este caso. Además, fuentes citadas por la revista The New Yorker denunciaron que Ingham ha sido más fiel a los intereses del padre que a la propia cantante.
En la actualidad, la tutela legal está dividida en dos partes: el ámbito financiero, controlado por Jamie Spears y la compañía Bessemer Trust, y el aspecto personal, tutelado por una abogada llamada Jodi Montgomery. La próxima audiencia se celebrará el 14 de julio sin la participación de la artista.