La ONU alerta de una represión "sin precedentes" contra los opositores de Maduro en Venezuela
El último informe documenta muertes, detenciones arbitrarias, torturas y violaciones entre críticos del gobierno y lo describe como crímenes de lesa humanidad
BarcelonaEl gobierno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, elevó a un nivel "sin precedentes" la represión contra los opositores y cometió violaciones de los derechos humanos que se pueden calificar de crímenes de lesa humanidad, según concluyó la misión independiente de las Naciones Unidas sobre Venezuela en su último informe, publicado este martes. Entre las violaciones que se han podido documentar se encuentra la muerte de personas que participaban en protestas, detenciones arbitrarias y violaciones graves de los procesos judiciales, desapariciones forzadas, torturas y violencia sexual.
La misión indica que este tipo de conductas ya las había documentado en investigaciones anteriores y que se producen "como parte del mismo ataque generalizado y sistemático contra la población civil, en cumplimiento de una política estatal de silenciar, desalentar y sofocar la oposición en el gobierno del presidente Maduro". Añade que algunas de estas violaciones de derechos humanos pueden constituir también el crimen de lesa humanidad de persecución basada en motivos políticos, teniendo en cuenta que las víctimas son personas opositoras en el gobierno (o que son percibidas de este modo) o "simplemente críticas con el gobierno".
El informe describe una "estructura represiva del estado" en la que se involucran "una amplia gama de actores institucionales", desde el propio presidente Maduro: "Las declaraciones de las máximas autoridades del estado, sobre todo después del 28 de julio [el día de las elecciones presidenciales], alentaron y dirigieron la represión y contribuyeron a generar un clima de hostilidad y violencia". También han participado las fuerzas de seguridad del estado, las autoridades judiciales, la autoridad electoral e incluso la Asamblea Nacional , "instrumental en la aprobación de nuevas leyes restrictivas del espacio cívico y democrático sin ningún debate genuino y democrático"
La misión de la ONU ha documentado al menos 25 muertos por la represión policial en las protestas antichavistas de quienes consideran que la victoria de Maduro es fruto del fraude electoral. Entre las víctimas mortales hay dos menores, de 15 y 17 años Aunque los investigadores no han podido determinar quién los mató, sí consta que en varios de los casos. investigados había efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana o de la Policía Nacional Bolivariana que hicieron uso de sus armas de fuego para reprimir a los manifestantes. críticos con el gobierno como durante las protestas posteriores a los comicios. "Después de las elecciones del 28 de julio las autoridades pusieron en marcha una campaña de detenciones masivas e indiscriminadas sin precedentes, al tiempo que continuaron las detenciones selectivas de actores de la oposición y de la sociedad civil", dice la misión de la ONU, y añade que entre los detenidos se encuentran 158 menores (algunos con discapacidad), que han sido acusados de delitos graves como terrorismo, "un fenómeno que la misión no había identificado anteriormente".
Además, aseguran que se han producido violaciones graves de los procesos posteriores a la detención. "Las apariencias de legalidad, que ya eran mínimas en períodos anteriores, han desaparecido casi por completo", alerta la misión, y avisa de que "el riesgo de desintegración del estado de derecho es muy elevado".
Torturas y violaciones
Los investigadores también han documentado al menos siete casos de tortura: puñetazos, golpes con planchas de madera o con bates, descargas eléctricas, asfixia con bolsas de plástico, inmersión en agua fría y privación del sueño. Pone como ejemplo el caso de John Álvarez, líder juvenil del partido Bandera Roja, detenido el 30 de agosto del pasado año, que sufrió golpes y descargas eléctricas en los genitales y en otras partes del cuerpo para obligarle a implicar varios líderes sindicales, políticos y periodistas en actos ilegales.
El informe también alerta de un "fuerte incremento" de casos de violencia sexual contra mujeres y niñas, tanto detenidas como familiares de presos, que fueron agredidas en el momento de ir a visitarlos a los centros de detención .
Todo ello en un contexto en el que la libertad de expresión "se ha visto limitada de forma grave por los ataques y acoso judicial contra periodistas", dice la ONU, que constata la detención de al menos 16 periodistas, la mayoría después de las elecciones.