María Corina Machado reaparece en Noruega: "Tengo muchas esperanzas de que Venezuela sea libre"
Ha comparecido en rueda de prensa al día siguiente de que su hija recogiera el premio Nobel de la Paz
BarcelonaDespués de un año escondida, la líder opositora venezolana María Corina Machado ha podido llegar a Oslo al día siguiente de que le entregaran el premio Nobel de la Paz. En una rueda de prensa con el primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, Machado reiteró su compromiso contra el régimen de Nicolás Maduro: "Tengo muchas esperanzas de que Venezuela sea libre y que pueda dar la bienvenida a todos los venezolanos que han tenido que huir".
La ganadora del Nobel de la Paz ha aseverado que el Ejecutivo venezolano se sostiene por un "fuerte sistema de represión" financiado por el tráfico de armas y de petróleo. Cuando estos flujos económicos se debiliten, "el régimen se acabará", expresó Machado, quien pidió a la comunidad internacional que ayude a cortarlos.
La entrega del premio Nobel a Machado coincide con una escalada de la guerra psicológica y el intervencionismo de Washington contra Maduro, y cada vez parece más cerca una posible operación militar contra Venezuela. La amenaza se ha intensificado este miércoles con la incautación de un petrolero en las costas del país en una operación militar estadounidense. En este sentido, preguntada sobre su hipotético apoyo a esta acción militar, Machado ha contestado ante la prensa que Venezuela "ya ha sido invadida" y ha acusado al gobierno de Maduro de dejar operar libremente a agentes rusos, iraníes y grupos terroristas y cárteles de la droga.
Machado ha reaparecido esta madrugada en el balcón del Grand Hotel de Oslo tras llegar a la capital noruega para recibir el Nobel. Desde allí, ha saludado a sus seguidores de madrugada, visiblemente cansada pero sonriente, y ha cantado el himno de su país con la mano en el pecho, antes de acercarse a las decenas de venezolanos congregados en el exterior para darle la bienvenida.
Entre teléfonos móviles que la grababan y gritos de "¡Viva!", Machado se ha acercado a las vallas instaladas por la policía noruega por motivos de seguridad, y en varias ocasiones ha subido para acercarse aún más a sus seguidores, darles la mano, echarles besos e incluso. "He venido a recibir el premio en nombre del pueblo venezolano y lo devolveré a Venezuela en el momento oportuno", expresó posteriormente en el parlamento noruego ante los periodistas. "Por supuesto, no diré cuándo".
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Su llegada a Oslo ha estado rodeada de incertidumbre. El pasado fin de semana aseguró en el Instituto Nobel que estaría en Oslo para la ceremonia de entrega del Nobel del miércoles. Sin embargo, en la víspera del acto solemne no pudo participar en la tradicional rueda de prensa de los galardonados, como estaba previsto, ni tampoco llegó a tiempo al Ayuntamiento de la capital noruega para recoger el premio. El mismo miércoles dijo en una conversación telefónica desde un lugar desconocido con Frydnes que ya era "camino de Oslo" y que, en cuanto llegara, podría abrazar a toda su familia: "Y tantos venezolanos y noruegos que conozco y que comparten nuestra lucha y nuestro esfuerzo", añadió. A Oslo, ya le esperaban su hija Ana Corina Sosa –que el miércoles pronunció en nombre de la madre el discurso de aceptación del premio Nobel de la Paz–, sus dos hijos, su hermana y su madre.
Odisea hasta Oslo
El viaje hasta Oslo de Machado ha sido una auténtica odisea. Según apuntan varios analistas citados por la agencia Efe, el itinerario habría comenzado el martes con una salida marítima de Venezuela hacia Curazao y se habría completado con un largo trayecto aéreo de cerca de 9.000 kilómetros hasta la capital noruega, previa escala en Estados Unidos. La opositora, de 58 años, ha aterrizado esta madrugada en Oslo a bordo de un avión privado que, según las plataformas de seguimiento de vuelos FlightRadar24 y FlightAware, había salido por la mañana desde Curaçao, una de las islas del Reino de los Países Bajos en el Caribe, situada a tan sólo 6.
El avión, con capacidad para trece pasajeros, está matriculado en México, tiene su base en el aeropuerto internacional de Santiago de Querétaro y es operado por la empresa JetVip Business Aviation. Para ir a buscar Machado, la aeronave había salido el martes del aeropuerto ejecutivo de Miami Opa Locka, en Florida (EE.UU.), con destino al aeropuerto internacional Hato de Willemstad, la capital de Curazao, donde aterrizó por la noche. Desde allí, según las plataformas de seguimiento, el avión despegó el miércoles a las 6.42, hora local (10.42 GMT), para afrontar un vuelo de cuatro horas y cuarenta y tres minutos hasta el aeropuerto internacional de Bangor, en el estado de Maine (EE.UU.), donde realizó una escala técnica. El último tramo, un vuelo de seis horas y veinticuatro minutos entre Bangor y el aeropuerto Oslo-Gardermoen, concluyó poco antes de la medianoche.