Kim Jong-un exhibe músculo militar junto a China y Rusia
Corea del Norte reivindica su papel de "aliado útil" y presenta un misil con capacidad para atacar a EEUU
TokioCorea del Norte conmemoró este fin de semana el 80 aniversario de la fundación del Partido de los Trabajadores con un desfile de gran formato en Pyongyang que combinó espectáculo interno, afirmación ideológica y mensaje geopolítico. El líder Kim Jong-un presidió el acto este viernes por la noche acompañado de delegaciones extranjeras, entre ellas la del primer ministro chino, Li Qiang, y la del vicepresidente ruso, Dmitri Medvedev, en un escenario que sirvió para proyectar el régimen como un "aliado útil" ante Pekín y Moscú, y que reforzaba su posición en medio de las tensiones con Washington y Seúl, pese a dejar la puerta entreabierta a una abierta Trump.
La auténtica protagonista del desfile fue, sin embargo, la tecnología militar: Pyongyang presentó el Hwasong-20, que la prensa oficial describió como "el arma estratégica nuclear más poderosa" del país. El nuevo misil intercontinental, montado sobre un lanzador móvil de gran tamaño, estaría equipado con un motor de combustible sólido que reduce notablemente el tiempo de preparación y aumenta la capacidad de respuesta. El régimen apunta a que su alcance podría llegar al territorio continental de Estados Unidos, un avance celebrado internamente que elevaría el nivel de disuasión y, al mismo tiempo, enviaría un mensaje nada ambiguo a Washington.
La presencia del primer ministro chino, Li Qiang, dio a la celebración de esa fecha una dimensión que iba mucho más allá de la política interna. En público, tanto Kim como Le insistieron en la necesidad de "fortalecer la cooperación" y de intensificar la comunicación política y económica, pero el gesto de Pekín tiene una lectura más profunda: China busca estabilizar la península y mantener abiertos los canales con Pyongyang en un momento de fuerte tensión con Washington por los aranceles. Esta visita equivale a un aval diplomático que refuerza su margen de maniobra y le permite presentarse frente al mundo como un actor relevante dentro del nuevo eje asiático que Pekín y Moscú quieren articular.
La presencia de una delegación rusa, encabezada por el expresidente Dmitri Medvedev, vicepresidente del Consejo de Seguridad de la Federación Rusa, añadió una nueva dimensión geopolítica al aniversario. Moscú busca reforzar los vínculos con Pyongyang en un momento de aislamiento internacional y convertir Corea del Norte en un aliado táctico frente a Occidente. Más allá de los gestos protocolarios, el encuentro habría permitido aumentar los canales de cooperación económica y militar –desde el intercambio tecnológico hasta posibles acuerdos logísticos, de suministro de armamento o de asesoramiento militar– que pueden ayudar a Rusia a sostener el esfuerzo bélico en Ucrania. Para Kim Jong-un, el acercamiento a Moscú no sólo afianza una alianza útil y beneficiosa sino que le ofrece margen de maniobra diplomático para unas hipotéticas nuevas conversaciones con Washington.
Encuentro con Trump
Esta conmemoración ha vuelto a poner sobre la mesa la posibilidad de una nueva reunión entre Kim Jong-un y Donald Trump, durante el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), previsto para el mes de noviembre en Gyeongju, en Corea del Sur. En agosto Trump ya había expresado su voluntad de reanudar el diálogo con el líder norcoreano y admitió la posibilidad de celebrar una nueva cumbre antes de finalizar el año, aunque no dio más detalles.
Kim y Trump se reunieron hasta tres veces durante el primer mandato del presidente estadounidense, cuando ambos llegaron a decir que se habían "enamorado" mutuamente, pero esos encuentros no desembocaron en ningún acuerdo sólido sobre la desnuclearización ni de seguridad. Desde la llegada de la administración Biden, Corea del Norte se ha reafirmado al considerarse un poder nuclear "irreversible". Pyongyang asegura que Kim conserva "buenos recuerdos" de Trump y estaría dispuesto a reanudar las conversaciones siempre que Washington abandonara sus exigencias de desarme nuclear unilateral.