Biden: "Una guerra nuclear no se puede ganar y nunca se tiene que luchar"
El presidente norteamericano quiere ampliar el Consejo de Seguridad de la ONU para evitar el veto ruso
BarcelonaContundente, directo y categórico. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha ido al grano durante su intervención en la Asamblea General de las Naciones Unidas, y ha empezado su discurso culpando directamente al presidente ruso, Vladímir Putin, de la guerra en Ucrania y acusándolo de ser un total irresponsable. "Una guerra nuclear no se puede ganar y no se tiene que luchar nunca", ha afirmado Biden, que ha respondido así a su homólogo ruso, que este miércoles ha agitado el fantasma de la amenaza nuclear en un discurso televisado en el que ha anunciado la movilización de 300.000 reservistas rusos para mantener la invasión de Ucrania.
"Putin asegura que él tenía que actuar, porque Rusia estaba siendo amenazada. Nadie amenazó a Rusia. Nadie más que Rusia fue quien buscó el conflicto", ha dicho Biden mencionando directamente en su discurso el nombre del presidente ruso, al que ha acusado también de querer “borrar” del mapa a Ucrania. "Esta guerra busca acabar con el derecho de Ucrania de existir, dicho de manera simple", ha insistido el presidente norteamericano sin tapujos.
“Uno no puede tomar el territorio de una nación por la fuerza. Por eso, cada uno de los que estamos aquí presentes en este recinto tiene que actuar de manera clara y decidida. Ucrania tiene los mismos derechos que cualquier nación soberana”, ha continuado, apelando de este modo a la acción de los países miembros de las Naciones Unidas. De hecho, ha afirmado que con la invasión de Ucrania por parte de Rusia “está en riesgo todo lo que esta institución representa”.
Precisamente por eso, Biden ha abogado por impulsar de una vez una reforma del Consejo de Seguridad de la ONU, cosa que hace décadas que está en la agenda pero que nunca se ha llevado a cabo a pesar de que se han hecho varias propuestas. En concreto, el presidente norteamericano ha dicho que habría que ampliar los miembros permanentes y no permanentes del Consejo de Seguridad, después de que este órgano se haya visto bloqueado por el veto ruso durante la guerra en Ucrania. Según ha dicho, los miembros permanentes, entre ellos Estados Unidos, tienen que "evitar el uso del veto excepto en situaciones poco habituales y extraordinarias" para asegurar que el Consejo de Seguridad es "creíble y efectivo".
Según el inquilino de la Casa Blanca, habría que dar plaza fija dentro del Consejo a países de África y América Latina y el Caribe, cosa que cambiaría totalmente el actual tablero internacional. "Creo que ha llegado el momento de hacer esta institución más inclusiva", ha argumentado, a pesar de que no ha precisado qué países tendrían que ser los escogidos. El principal órgano de decisión de las Naciones Unidas cuenta con cinco miembros permanentes y con poder de veto (Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido) y con diez más que son elegidos por periodos de dos años.
En cuanto a la proliferación nuclear, Biden no ha apuntado a Rusia como la única amenaza actual y ha destacado que también hay otras “tendencias preocupantes” de países como China, Corea del Norte e Irán. En el caso de Irán, el presidente norteamericano se ha mostrado dispuesto a recuperar el pacto nuclear de 2015, que Washington abandonó durante la administración de Donald Trump, siempre que Teherán cumpla las obligaciones en este sentido. "Los Estados Unidos son claros: nunca permitiremos a Irán conseguir un arma nuclear. Sigo pensando que la diplomacia es la mejor manera de obtener este resultado", ha declarado.
Biden también ha tenido palabras para China: "No buscamos el conflicto, no buscamos una guerra fría. No queremos que ninguna nación tenga que elegir entre los Estados Unidos y otro aliado. Pero los Estados Unidos promoverán un Indopacífico libre, abierto, seguro y un mundo próspero", ha afirmado, dejando claro que Washington no apoyará un cambio unilateral del statu quo con Taiwán, la soberanía de la cual reclama Pekín. De este modo el presidente norteamericano intentaba también calmar los ánimos después de que el domingo afirmara en una entrevista a la cadena CBS que enviaría fuerzas militares norteamericanas a defender Taiwán en caso de que China invadiera la isla.
Biden también ha hablado durante su discurso de la crisis alimentaria, agravada por la crisis en Ucrania y que amenaza sobre todo a la población de los países empobrecidos o en vías de desarrollo. En este sentido, el mandatario ha anunciado 2.900 millones de dólares de ayuda, una cantidad que se suma a los 6.900 millones que la Casa Blanca ya ha destinado este año a proyectos de seguridad alimentaria en todo el mundo.
China ha pedido este miércoles "diálogo" y apoyar "cualquier esfuerzo" que conduzca a un alto el fuego en Ucrania después de que el presidente ruso, Vladímir Putin, haya anunciado la movilización militar de parte de la población rusa para mantener la invasión de este país. "Hay que apoyar todo esfuerzo que lleve a una resolución pacífica de esta crisis", ha afirmado el portavoz chino del ministerio de Exteriores, Wang Wenbin. También ha recordado que la posición de China sobre el conflicto “siempre ha sido clara y no ha cambiado”. Según ha dicho, pasa por “respetar la integridad territorial de todos los países”, incluido Ucrania y, a la vez, prestar atención a las “legítimas preocupaciones de todos los países”, en referencia a Rusia. Así mismo, el portavoz ha reiterado que Pekín está en contra de las sanciones contra Moscú porque, según ha argumentado, "no tienen base en el derecho internacional" y "no solucionan los problemas".