El ejército israelí asalta el mayor hospital de Gaza
Las fuerzas israelíes publican un vídeo en el que muestran armas que habrían encontrado dentro del complejo que acoge a miles de pacientes, médicos y desplazados
BarcelonaEl ejército israelí ha anunciado esta madrugada una incursión contra el hospital de Al Shifa, el más importante de Gaza, y ha justificado la operación como "de precisión y dirigida contra Hamás en un área específica" del complejo médico. El objetivo son los operativos del grupo yihadista. Munir al-Bursh, director general del ministerio de Salud de Gaza, afirmó a primera hora de la mañana en la cadena Al Jazeera que las fuerzas israelíes habían atacado el lado oeste del centro, donde hay cientos de pacientes y personal médico y miles de personas desplazadas. “Hay grandes explosiones y ha entrado pulso en las zonas donde estamos. Creemos que ha habido una explosión dentro del hospital", ha asegurado. La Organización Mundial de la Salud, OMS, ha denunciado que ha perdido todo contacto con el centro médico y que teme por la seguridad del personal y de los pacientes.
Por la noche el ejército israelí ha confirmado que continúa "activo" en el hospital y ha asegurado que los soldados han encontrado un centro de mando operacional de Hamás.Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) han publicado un vídeo en el que muestran armas, munición, granadas y chalecos antibalas que habrían encontrado en el hospital, donde también han recuperado información de inteligencia y aparatos tecnológicos, según el portavoz del ejército, Daniel Hagari. y ha asegurado que son pruebas falsas: "El ejército (israelí) está en el hospital y nadie sabe qué están haciendo o qué armas han llevado para asegurar que las han encontrado dentro del complejo", ha señalado el ministerio de Exteriores palestino.
El primer ministro israelí, Binyamin Netanyahu, ha insistido en que el objetivo es que no quede ningún refugio para los milicianos de Hamás. "¿Recuerdan cuándo nos dijeron que no entraríamos en Gaza? Entramos. Dijeron que no llegaríamos a las afueras de la ciudad de Gaza y llegamos. Dijeron que no entraríamos en el Hospital Al Shifa y hemos entrado en él". ", dijo durante una visita a la base militar de entrenamiento de Zikim, cerca de la frontera con la Franja.
La operación ha comenzado después de que Estados Unidos anunciara que tenía pruebas de que Hamás utiliza el centro con fines militares, algo que la organización islamista y los equipos médicos desmienten y que ni Israel ni EEUU han acreditado. Israel dice que el asalto se basa en "información de inteligencia y necesidades operativas". La dirección del hospital había reclamado una visita de expertos independientes de la ONU para verificar la situación en el centro y descartar su uso militar.
En su comunicado, el ejército israelí asegura que dentro del operativo del ataque al hospital hay "equipos médicos y arabófonos" que han sido entrenados por lo que define como "un entorno complejo y sensible". El portavoz de seguridad de la Casa Blanca, John Kirby, aseguró que Washington "no dio ninguna luz verde a las operaciones militares en torno al hospital" y que Estados Unidos "no está involucrado en estos procesos".
Dado que no hay periodistas dentro del hospital, desde que Israel ha intensificado los bombardeos y ha ordenado la evacuación del centro, y tampoco permite el acceso independiente de la prensa a la franja de Gaza, es muy difícil tener información contrastada sobre lo que está pasando en el hospital. En el Jazeera cita fuentes de dentro del complejo que explican que las tropas israelíes han ordenado por altavoces a todos los hombres que se rindan, mientras los tanques rodean el complejo. También dicen que han salido una treintena de hombres desnudos y con los ojos tapados en el patio principal, donde les estarían interrogando. Aseguran que las tropas israelíes han destruido un almacén con material médico.
Según la agencia EFE, que cita a medios palestinos, habría al menos 200 detenidos, incluido personal médico y desplazados. Un portavoz del gobierno de Gaza aseguró que los soldados israelíes dispararon contra personas que huían del hospital. La oficina de prensa del ejecutivo gazatino dijo que el ejército hebreo disparó también en el interior del complejo, lo que negó un alto oficial israelí, que aseguró que los combates sólo se produjeron en el exterior.
Ahmed Mokhallalati, médico del centro, ha explicado a la cadena Al Jazeera que en el centro hay unos 650 pacientes, de los que un centenar se encuentra en estado crítico. También hay 700 sanitarios y personal administrativo que desde el fin de semana no pueden tratar a los enfermos por falta de electricidad, medicamentos, agua y alimentos. Y entre 2.000 y 3.000 desplazados que se habían refugiado de los bombardeos en el centro. Al Shifa ha llegado a acoger a unos 60.000 desplazados, pero la mayoría se han marchado desde el viernes, cuando el ejército israelí rodeó el hospital y bombardeó sus alrededores. "Los desplazados son civiles, familias enteras. Están atrapados por el pánico". Según el cirujano, los bombardeos fueron constantes toda la noche.
Condena de la Autoridad Palestina
La Autoridad Palestina, en su pronunciamiento más duro hasta ahora ha hablado de una "flagrante violación del derecho internacional", y ha pedido "una intervención internacional urgente para proteger a los civiles en el hospital".
En medio del ofensiva terrestre y los bombardeos israelíes, todos los centros sanitarios del norte de Gaza, donde se encuentra la mayor parte de la infraestructura sanitaria de la Franja, habían dejado de funcionar, con la única excepción de Al Ahli, donde hay 500 pacientes. "Están fuera de servicio debido a la carencia de electricidad, suministros médicos, oxígeno, alimentos y agua, además de los bombardeos", según la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria de la ONU.
La situación del Hospital Al Shifa es la más grave. De acuerdo con el director del centro, Mohamed Abu Salmiya, hay siete bebés prematuros que han muerto por la falta de electricidad y otros 30 cuya vida corre peligro. Los gazatinos se han visto obligados a excavar una fosa común alrededor del complejo para enterrar hasta 170 cadáveres en proceso de descomposición. El representante de la Organización Mundial de la Salud en Palestina, Rik Peeperkorn, afirmó que están considerando una posible evacuación de todos los pacientes y personal del hospital, pero subrayó que son necesarias "garantías de una salida segura para los evacuados y combustible para las ambulancias de la Media Luna Roja. Con todo, admitió que es muy difícil poder realizar esta evacuación después de haber perdido todo el contacto con el personal del centro.