Estados Unidos

Luisiana impone un póster de los Diez Mandamientos en las escuelas públicas

Los grupos en favor de las libertades civiles aseguraron que recorrerán la medida, que consideran anticonstitucional

Cinto Mora i Abelaira
y Cinto Mora i Abelaira

BarcelonaEl gobernador republicano de Luisiana, Jeff Landry, firmó ayer, miércoles un proyecto de ley que hace que el estado sea el único del país en exigir mostrar a los Diez Mandamientos en todas las aulas de las escuelas públicas. La decisión se enmarca dentro del plan del nuevo gobernador, que tomó posesión del cargo en enero, de impulsar una agenda conservadora en el estado. Poco después de que se aprobara la ley, la Unión Americana de Libertades Civiles ha anunciado que pedirá bloquearla, alegando que viola la separación constitucional entre el estado y la Iglesia, también fijada por una sentencia del Tribunal Supremo de los Estados Unidos.

El proyecto de ley concreta que el póster de los Diez Mandamientos debe ser en “letra grande y fácil de leer” y debe colocarse en todas las aulas públicas, desde parvulario hasta las universidades financiadas por l estado. La medida debería entrar en vigor en 2025.

Cargando
No hay anuncios

La Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos prohíbe al gobierno “el establecimiento de la religión”, y en 1980 la Corte Suprema dictaminó a la sentencia Stone versus Graham que una ley de Kentucky sobre la publicación de los Diez Mandamientos en la escuela era inconstitucional.

Junto con este proyecto de ley, el gobernador Landry ha firmado un paquete de leyes que ha asegurado que están diseñadas para “ampliar la fe en las escuelas públicas”. “Si desea respetar el estado de derecho, debe empezar por el legislador original, que fue Moisés”, dijo el político republicano durante la ceremonia de firma.

Cargando
No hay anuncios

Otras medidas autorizarán la contratación de curas en las escuelas, restringirán que los profesores mencionen los conceptos de orientación sexual o identidad de género e impedirán que las escuelas utilicen el nombre o los pronombres preferidos de un estudiante transgénero salvo que los padres los autoricen. Otros estados controlados por los republicanos, como Texas, Oklahoma y Utah, también han propuesto leyes similares pero todavía no han sido aprobadas.