Trump sale al rescate de Milei en el momento más crítico de su gestión
El presidente argentino sale reforzado de la reunión bilateral con Trump, que le da oxígeno para llegar a las elecciones de octubre
Buenos AiresEn su duodécimo viaje a Estados Unidos desde que es presidente de Argentina, Javier Milei ha mantenido una reunión bilateral con Donald Trump, en Nueva York, en el marco de la asamblea general de Naciones Unidas. Cumbre aparte, Milei necesitaba abordar, con urgencia, el rescate para la grave crisis económica y financiera que atraviesa Argentina. Tras el batacazo electoral en la provincia de Buenos Aires, de un revés legislativo en el Congreso y de una intervención in extremis del Banco Central para sostener un precio ficticio del dólar –sumado al telón de fondo del caso de corrupción que implica el núcleo de poder del gobierno–, los valores macroeconómicos que, hasta ahora, habían sostenido la gestión del ultraliberal (y, de algún modo, justificado el plan motosierra), han ido cayendo de forma
Hasta que el lunes el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, emitió un tuit, a sólo minutos de que abrieran los mercados, en los que anunciaba que el gobierno de Trump está dispuesto a hacer "lo necesario" para impulsar la economía argentina y que, a tal fin, "todas las opciones de estabilización están sobre la mesa", ya que, destacaba, el . Los mercados –un sujeto difundido que gobierna a Argentina de facto– se calmaron enseguida, y Milei ganó algo de tiempo antes de su reunión, el martes, con Donald Trump.
Minutos antes del encuentro, Trump ha hecho una publicación en su red Truth Social, en la que hablaba de Milei como un "líder fantástico y poderoso" que "devolvió la estabilidad a la economía argentina" tras el "desastre heredado" del anterior presidente, Alberto Fernández, "de extrema izquierda", a quien ha comparado con la izquierda.
En la reunión en sí –que duró quince minutos– Trump felicitó a Milei por su gestión, pero dijo que no cree que Argentina necesite un rescate financiero. Estas declaraciones han generado primeramente cierta confusión, ya que existía expectativa por anuncios concretos, que todavía podrían llegar, tras la reunión de Milei con la directora del Fondo Monetario Internacional, organismo con el que el gobierno argentino acumula ya una deuda aproximada de 75.000 millones de dólares hasta 2045.
Además, Trump ha expresado su "pleno apoyo" al mandatario y ha pedido su "reelección" para que pueda "completar el trabajo". Aunque las próximas elecciones presidenciales en Argentina no están previstas hasta 2027, se interpreta que Trump se refería a las elecciones legislativas de medio plazo que tendrán lugar este octubre. Al final, en la foto de los dos presidentes apretándose la mano, Milei mostraba el documento entregado por Trump: era su propio tuit, publicado un rato antes, impreso sobre un papel.
Minutos después de la bilateral, el Banco Mundial ha anunciado que "está acelerando" su apoyo a Argentina: pretende desembolsar anticipadamente 4.000 millones de dólares de los 12.000 millones que anunció el pasado mes de abril, enfocados a desbloquear sectores clave como la minería, el acceso a la energía, la financiación.
Algunos en Argentina han bautizado este anuncio como "el efecto Bessent", por el impacto que, desde el lunes, tienen las palabras del secretario del Tesoro de Estados Unidos en la economía. "Trump está abiertamente apoyando la campaña del gobierno", dice el economista Hernán Letcher en entrevista con el ARA, "y Milei está comprando tiempo para llegar a octubre con más oxígeno, sin resolver la cuestión de fondo".
Argentina entra ahora en una nueva campaña electoral: la del 26 de octubre es una cita clave para la gobernabilidad de Milei, que tras casi dos años de gestión, sigue en minoría en la Cámara de los Diputados y en el Senado, lo que le lleva a gobernar a menudo por decreto, una opción que no se presenta sostenible de cara a la segunda mitad del mandato.
La estrategia del gobierno, y el mensaje de base para esta campaña, es "no aflojar ahora" y "hacer que todo el esfuerzo valga la pena": dos consignas que, tanto Milei como los miembros de su gabinete han ido diseminando en los últimos días, tanto en las redes sociales como en los medios de comunicación y en actos de campaña, mientras las mayorías sociales en las Argen sustanciales en su vida cotidiana.