Donald Tusk supera la cuestión de confianza en Polonia tras la victoria de los ultras en las presidenciales
El dirigente polaco planteaba la votación como un intento de recuperar la confianza de sus socios y ha anunciado una remodelación del gobierno
BarcelonaEl primer ministro polaco, Donald Tusk, ha superado este miércoles la cuestión de confianza a la que él mismo se había sometido con la esperanza de recuperar la iniciativa política, después de que su aliado y alcalde de Varsovia, Rafal Trzaskowski, fuera derrotado por un estrecho margen por el ultraderechista Karol Nawrocki en las elecciones presidenciales de principios de mes. Los buenos resultados obtenidos por el conservador y novato en la política habían desatado una ola de dudas entre los socios de la coalición gobernante, sobre todo porque el presidente del país tiene derecho a aplicar el veto en las medidas aprobadas por el ejecutivo de Tusk. Nawrocki, que es exboxeador, encarna una postura más conservadora y nacionalista que Trzaskowski y el propio Tusk, reformistas y proeuropeístas.
"Tenemos el mandato de asumir toda la responsabilidad de lo que está pasando en Polonia", ha defendido Tusk, quien ha reivindicado que "gobernar a Polonia es un privilegio". El dirigente tenía todos los números de ganar la cuestión de confianza, puesto que su coalición controla 242 de los 460 escaños del hemiciclo. Pero la confianza que le ha otorgado este miércoles el Parlamento no se refleja en el conjunto de la sociedad. Una encuesta de SW Research hecha por el diario Rzeczpospolita estima que cerca de un tercio de los polacos opinan que el gobierno de Tusk no sobrevivirá hasta el final de la legislatura, en el 2027.
En un discurso desafiante ante el hemiciclo, Tusk se ha mostrado contundente con sus aliados y ha afirmado que no tolerará "de disputas". Con una metáfora futbolística, puso de ejemplo la derrota de la selección polaca en Helsinki del martes, para ilustrar las "potenciales consecuencias" de un conflicto entre aliados.
Tusk ha asegurado que está preparado para "seguir liderando el trabajo de este gobierno" hasta agotar la legislatura: "Durante dos años y medio conseguiremos nuevos éxitos para nuestra patria". "Conozco el gusto de la victoria y la amargura de la derrota, pero no la palabracapitulación", ha dicho.
Remodelación de gobierno
Sin embargo, Tusk ha anunciado una reorganización de su consejo de ministros en julio que incluirá "caras nuevas y un cambio en la estructura" actual. También tiene previsto nombrar a un portavoz de gobierno, una figura que no había existido hasta ahora en su equipo.
Desde que tomó las riendas del ejecutivo en octubre del 2023, Tusk ha aumentado el gasto en defensa y ha recortado la emisión de visados para migrantes, dos medidas que ha presentado como grandes hitos ante el hemiciclo. Pero lo cierto es que el grueso de la población polaca se siente desencantada con el incumplimiento de algunas de las promesas gracias a las que Tusk ganó las elecciones, como la liberalización de las leyes sobre el aborto, la reforma del poder judicial y el aumento del límite de exención de impuestos.