Estudiantes alemanes llenan las calles contra el servicio militar: "No queremos ser carne de cañón"

BerlínBajo el lema "No queremos ser carne de cañón", miles de estudiantes alemanes protestaron este viernes en varias ciudades de Alemania contra la posible reintroducción del servicio militar obligatorio. La "huelga escolar" ha convocado manifestaciones en noventa localidades del país contra los planes del gobierno del conservador Friedrich Merz de reintroducir el servicio militar, de momento con carácter voluntario. La nueva ley tendrá, sin embargo, una serie de elementos obligatorios para los jóvenes de dieciocho años, como el deber de contestar a un cuestionario y presentarse a un examen médico.

"Mi vida, mi decisión", "Los jóvenes necesitan libertad", "No nos atraparán", "Queremos más cerveza, no armas", "No somos carne de cañón para sus crisis", "La guerra es una mierda", "Ningún servicio militar obligatorio para una generación que nunca le ha pedido", pancartas de la protesta que ha recorrido las calles de Berlín.

La protesta estudiantil ha coincidido con la aprobación en el Bundestag –la cámara baja del Parlamento alemán– del proyecto de ley para "la modernización del servicio militar". Ha obtenido 323 votos a favor, 272 en contra y una abstención. El proyecto de ley deberá ser aprobado antes de fin de año por el Bundesrat, el órgano de representación de los dieciséis estados federados de Alemania, para que entre en vigor en enero. El nuevo servicio militar será, por el momento, voluntario, aunque la ley contemple la posibilidad de recurrir al "reclutamiento obligatorio en caso de necesidad". En ese caso, el Bundestag debería votar primero una nueva ley.

Dudas entre los ciudadanos

La berlinesa Anne Hackenberger, madre de dos chicos de 17 y 14 años, teme que sus hijos se vean finalmente obligados a realizar el servicio militar. "No entregaré a mis hijos", advierte al gobierno alemán en la pancarta que lleva. "La ley no está redactada por lo que podamos estar realmente seguros de que no acabarán en el ejército. Hay muchos condicionantes en el proyecto de ley", dice. Y explica que, en caso de necesidad, se puede modificar, y también si no se presentan suficientemente voluntarios. "Pero no sabemos qué es suficiente ni qué es necesario. ¿Y entonces, qué? La mayoría de gente no estará dispuesta a ir a la guerra. Por eso, creo que no habrá tantos voluntarios, por lo que podría darse este caso de necesidad. No he criado a mis hijos para enviarlos a las trincheras", advierte esta madre.

"Con el nuevo reclutamiento obligatorio para todos los jóvenes nacidos en 2008, los responsables políticos vuelven a imponer una carga a los jóvenes sin preguntarles cómo se sienten", denunció en un comunicado el Comité Regional de Estudiantes de Berlín, que apoyó las protestas.

Si la ley entra en vigor tal y como está previsto el 1 de enero, todos los hombres alemanes de dieciocho años deberán cumplimentar un cuestionario y presentarse a un examen médico obligatorio para determinar su aptitud física. Las mujeres pueden hacerlo voluntariamente. En el cuestionario, se preguntará a todos los jóvenes nacidos a partir del 1 de enero de 2008 los datos personales, aspectos sobre su salud y si están o no dispuestos a realizar el servicio militar. Tras el examen médico, se determinará si el joven es apto o no para el servicio militar, si finalmente opta por hacerlo.

"La obligación de cumplimentar un cuestionario y de someterse a un examen médico no tiene nada que ver con la voluntariedad", ha denunciado la diputada de extrema izquierda Desirée Becker, que ha exhortado a los jóvenes a informarse sobre el derecho a la objeción de conciencia.

"No quiero que mi hermano pequeño, que nació en el 2008, sea reclutado", explica Merle a la protesta en Berlín. "Estoy en contra de la violencia y en contra del rearme. Creo que deberíamos trabajar más bien para encontrar una solución pacífica", explica esta estudiante berlinesa de diecinueve años.

En su discurso ante el Bundestag, el ministro de Defensa, Boris Pistorius, se ha mostrado convencido de que, con condiciones más atractivas, se podrá atraer a jóvenes suficientes para que se alisten voluntariamente al ejército alemán. "Hay muchos más jóvenes dispuestos a asumir responsabilidades de lo que quieren hacernos creer algunos sectores del Parlamento o de la opinión pública. Existe el sentido de la responsabilidad", ha dicho el ministro.

2.600 euros al mes

Para realizar el servicio militar más atractivo, el gobierno alemán ofrece una buena paga. Quienes presten servicio voluntario recibirán unos 2.600 euros brutos al mes. La duración mínima será de seis meses. Si se comprometen a realizar el servicio militar durante un mínimo de doce meses, se les concederá, además, una subvención de 3.500 euros para sacarse el permiso de conducir de turismos o camiones.

Que el servicio militar sea remunerado no es suficiente para convencer a Lias Hackenberg para alistarse. "Existe el peligro de que me envíen al frente y de que muera allí. No, mi vida no vale 2.000 euros, sinceramente", explica este joven berlinés, que cumplirá diecisiete años en pocos días. "Espero que valga más", apunta su madre. "Prefiero seguir viviendo y renunciar a los 2.000 euros", concluye Lias.

El pacifismo está muy arraigado en Alemania por el trauma de las dos guerras mundiales y la ideología nazi. Sin embargo, Alemania ha acelerado con Merz el rearme ante la amenaza de Rusia, que ha intensificado sus ataques híbridos en varios países europeos mediante drones, sabotajes y desinformación. En 2011, el servicio militar obligatorio quedó suspendido en Alemania y la Bundeswehr se convirtió en un ejército profesional. "La nueva realidad exige un nuevo servicio militar", ha defendido Pistorius.