Sánchez pide elecciones en Valencia para detener el negacionismo de PP y Vox

Madrid / Barcelona"El cambio climático ha causado más de 20.000 muertes en España en los últimos cinco años". El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha aprovechado su intervención durante la cumbre de líderes previa a la COP30, que se celebra en Belém, en medio de la Amazonia brasileña, para lanzar un mensaje de contundencia sobre los efectos de la emergencia climática. Sánchez, de hecho, lo ha aprovechado para recordar a las 229 víctimas mortales que dejó el fenómeno climático de la dana en la Comunidad Valenciana, hace poco más de un año, así como las muertes por las oleadas de calor extremo que el Estado ha sufrido en los últimos años.

Si en clave internacional el cónclave climático sirvió para señalar el negacionismo de Donald Trump, en el caso español Sánchez no dudó en lanzar un dardo contra PP y Vox coincidiendo, justamente, con las negociaciones entre ambos partidos para encontrar un sustituto para Carlos Mazón en el País Valenciano. De este modo, pidió abiertamente por primera vez que hay que "romper con la mayoría negacionista" en Valencia y que es necesario convocar elecciones. "Sigo con preocupación las negociaciones entre PP y Vox", ha dicho Sánchez, quien ha anticipado que un acuerdo entre la derecha y la extrema derecha puede derivar en un "desmantelamiento de la agenda climática en una zona, el Mediterráneo, que claramente se ha visto afectada por las consecuencias de la emergencia climática". De hecho, Sánchez ha sido tajante contra aquellos que niegan el cambio climático: "No hay evidencia empírica, por abrumadora que sea, capaz de hacer cambiar de opinión a quien ha decidido tener una venda en los ojos". En este sentido, el presidente español ha anunciado una aportación adicional de 45 millones de euros destinada a financiar programas internacionales de mitigación y adaptación al cambio climático: "El cambio climático no sólo mata, sino que empobrece".

Reunión PP-Vox en la Comunidad Valenciana

Mientras Sánchez cargaba contra PP y Vox, en la Comunidad Valenciana se ha dado el pistoletazo de salida a las negociaciones para relevar a Carlos Mazón en la Generalitat Valenciana. PP y Vox han mantenido una reunión formal en Valencia que ha hecho aflorar su incertidumbre. El PP aún no tiene candidato y el partido de Santiago Abascal ha pedido "un nombre", tal y como ha informado en un comunicado. Además, según fuentes consultadas por el ARA, aunque "la predisposición es buena", existe un "lío interno" importante en las filas populares y Vox pretende que primero saquen el agua clara ante el vacío de poder y las luchas internas en el PP valenciano por el candidato. El secretario general del partido de extrema derecha, Ignacio Garriga, con la adjunta a su cargo y persona de su máxima confianza, Montserrat Lluis –también catalana, y que pilota todas las conversaciones regionales–, aterrizó en la ciudad para reunirse con el equipo del secretario general del PP valenciano, Juanfran Pérez Llorca, posible nuevo presidente. Una reunión que se ha celebrado el mismo día que el Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado la dimisión de Mazón, sin agradecerle los servicios prestados, algo inusual.

El encuentro es solo un primer paso de unas conversaciones en las que el PP muestra señales de tener prisa y Vox calma, según fuentes consultadas por este diario. "Va por largo", aseguran fuentes conocedoras, a la espera de que se sepa el nombre de lo presidenciable y se puedan abordar los contenidos programáticos, en los que Vox prioriza las políticas antiinmigración –con especial énfasis en establecer como "prioridad nacional" las ayudas y subvenciones para los ciudadanos españoles– y contra el Pacto Verde Europeo. el propio Abascal ha cargado contra el discurso de Sánchez y su "terrorismo climático", y le ha culpado de nuevo a la dana en Valencia.

El comunicado de Vox contrasta con un silencio del PP, cerrado herméticamente y con un talante más bien críptico. Desde la extrema derecha han sido claros: "En el día de hoy se ha producido una primera toma de contacto con el PP, en la que se ha podido constatar buena voluntad de negociación. Por parte de Vox hemos trasladado la necesidad de que el PP decida quién será su nuevo candidato a la Generalitat Valenciana para, una vez designado, poder explorar con él la suya ante las políticas destructivas de Pedro Sánchez". Un movimiento que pasa la pelota en el tejado del PP, que estos días ha insistido en la necesidad de "la estabilidad" expresando el deseo deprisa. Así, siempre que el ARA ha consultado a Vox han apuntado que están "abiertos a ver hasta qué punto están dispuestos a asumir un programa o, si no, que decida el electorado", pero antes habrá que resolver el nombre, que no es una prioridad para los de Abascal. Pero pese a no ser el tuétano, desde Vox se ve imprescindible "para seguir avanzando". Esta negociación es una prueba de fuego que puede ser un "mensaje" para Alberto Núñez Feijóo, de cara a su futuro político en el Estado y la forma en que Vox le apretará.