Trump ordena al Pentágono reanudar "inmediatamente" las pruebas con armas nucleares
El presidente anuncia que pone fin a tres décadas de política de desarme nuclear después de que Rusia anuncie un segundo ensayo nuclear
WashingtonLa Casa Blanca parece dispuesta a quitarle el polvo al teléfono rojo. El miércoles por la noche, pocos minutos antes de reunirse en Corea del Sur con el presidente de China, Xi Jinping, Donald Trump ha anunciado la nueva directriz en el Pentágono para que reanude "inmediatamente" las pruebas con armas nucleares. La decisión llega después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, dirigiera la semana pasada maniobras de las fuerzas nucleares y después de que se suspendiera la cumbre de Budapest para poner fin a la guerra de Ucrania. El presidente estadounidense ha anunciado a Truth Social su decisión como una manera de situar a Estados Unidos a nivel nuclear en "una igualdad de condiciones" con Rusia y China.
"Estados Unidos tiene más armas nucleares que ningún otro país", ha escrito a Truth Social el presidente, y ha añadido: "Rusia está en segundo lugar y China en un tercer lugar muy por detrás, pero nos igualará en cinco años. Como otros países están testeando sus programas, he ordenado al departamento de Guerra [como ha rebateado las igualdad de condiciones. Este proceso empezará inmediatamente".
El anuncio desciende décadas de una política nuclear en la que Washington llevaba más de 30 años parando los ensayos nucleares. La última prueba fue en 1992, antes de que el expresidente George HW Bush implementara una moratoria sobre este tipo de test al final de la Guerra Fría. La Casa Blanca no se ha pronunciado todavía sobre las palabras del presidente ni tampoco ha dado más detalles sobre qué tipo de ensayos nucleares se trataría.
Aunque Trump ha acusado a Pekín y Moscú de conducir ensayos nucleares, la realidad es que el primero no ha conducido ninguno desde 1996, y tampoco hay confirmación más allá de 1990 que Rusia haya hecho. Sí es cierto que China está ampliando su arsenal y que en los últimos días el Kremlin ha realizado pruebas con armas que tienen capacidades nucleares. Primero anunció que habían probado con éxito el misil de crucero de largo alcance Burevéstnik, que cuenta con propulsión nuclear, y este mismo miércoles hacía público un ensayo con un submarino con capacidad nuclear bautizado como Posidón.
El Kremlin ha subrayado que Rusia no ha hecho ningún ensayo nuclear, sino que simplemente ha probado dos sistemas de armamento de nueva generación con propulsión atómica. "Esto no puede interpretarse de ninguna manera como un ensayo nuclear", ha dicho el portavoz del gobierno ruso, Dmitri Peskov, quien ha asegurado que Moscú informó a la Casa Blanca sobre estas pruebas.
Durante su primera presidencia, Trump ya consideró reanudar los ensayos nucleares con una detonación de prueba en el 2020, según reveló el Washington Post. Todo ello, con el fin de presionar en las negociaciones con China y Rusia. Ahora lo hace también en medio de las fallidas negociaciones con Putin por un alto el fuego en Ucrania.
La ubicación de las pruebas todavía está por determinar. "Lo anunciaremos", dijo Trump a los periodistas durante el encuentro con Xi. Los últimos ensayos nucleares que el Pentágono condujo a finales de la Guerra Fría estuvieron en Nevada y estaban bajo tierra, en unas condiciones que garantizan una mayor seguridad que las pruebas al aire libre. Probablemente, si el gobierno estadounidense acaba reanudando las pruebas sea en estas instalaciones subterráneas.
Ahora bien, que sea más seguro no quiere decir que no pueda haber riesgos. En el pasado, durante estos últimos ensayos nucleares subterráneos hubo casos de fugas radiactivas, además de que las explosiones en el subsuelo provocaron también temblores en edificios tan lejanos como los ubicados en Las Vegas, con la posibilidad de causar daños estructurales.