Los últimos ocho años han sido los más cálidos de la historia
Las compensaciones de los ricos a los pobres por los daños climáticos entran en la agenda de la COP27
BarcelonaLa COP27, la cumbre del clima de las Naciones Unidas que este año se celebra en Egipto, ha puesto en marcha los motores este domingo con el compromiso de que, por primera vez, se debatirá cómo se indemnizará a los países pobres que, a pesar de no ser grandes emisores de CO₂, son las víctimas más directas de la crisis climática. Ya se esperaba que este fuera el tema crucial de la convención de este año, pero este domingo se ha confirmado después de que se haya introducido en la agenda oficial de la cumbre. Es un hecho importante, puesto que en ninguna de las ediciones anteriores se había dado este paso, que, en principio, busca compensar a países en vías de desarrollo como Pakistán, Somalia o Bangladesh, castigados a menudo por fenómenos climáticos que condicionan las respectivas economías.
Estas compensaciones se llaman "pérdidas y daños" (loss and damage) en el argot de las negociaciones climáticas. Hasta ahora, siempre había quedado fuera de la agenda oficial, gracias a la negativa de países ricos como los Estados Unidos, que siempre han defendido que los países más contaminantes no tienen ninguna responsabilidad legal sobre los desastres climáticos y que, por lo tanto, estas indemnizaciones no se tienen que hacer. Para que un tema entre en la agenda oficial de la COP tiene que haber consenso entre todas las partes, es decir, entre los más de 190 países y organismos internacionales participantes.
El presidente de la COP27, el ministro de Exteriores egipcio, Sameh Sukri, ha celebrado que la noticia es fruto de la "responsabilidad y el compromiso" de todas las partes y de la "voluntad colectiva" para preservar "la credibilidad y la relevancia" de la cumbre. En la reunión preparatoria del junio pasado en la ciudad alemana de Bonn, la cuestión se intentó incluir en la agenda y no hubo acuerdo. Ahora sí. Aun así, es necesario que la prudencia impere: que una posible indemnización a los países más afectados por el cambio climático haya entrado en la agenda de la COP no implica que se llegue a un acuerdo sobre este tema. Los pronósticos de la mayoría de expertos son más bien pesimistas.
Una de las preguntas clave es con qué cantidad se tendría que compensar. El grupo de los Vulnerables 20 (V20), otro paraguas con el que negocian en estas cumbres unos 58 países de África y Próximo Oriente que son especialmente vulnerables a la crisis climática, ha calculado que los últimos 20 años de impactos climáticos han costado a sus países 525.000 millones de dólares. Según otro estudio de 2019, los países en desarrollo se enfrentarán en 2030 a una factura de entre 290.000 y 580.000 millones de dólares. El African Development Bank Group dice que las naciones africanas pierden anualmente entre el 5% y el 15% del PIB debido a los impactos de la crisis climática.
"Señal de auxilio"
"Tiene que haber resultados tangibles", ha dicho el ministro Sukri en su alocución inaugural desde la ciudad de Sharm el-Sheikh, que se encuentra en medio del desierto. "El principal objetivo de este encuentro [que durará casi dos semanas, hasta el 18 de noviembre] es que sea un punto de inflexión a la hora de conseguir una acción multilateral colectiva", ha añadido el político egipcio.
Un mensaje similar al que ha expresado, también durante un discurso, el secretario general de la ONU, António Guterres. "El planeta nos está enviando una señal de auxilio", ha alertado el portugués, que ha querido recordar que "el estado del clima mundial es una crónica del caos climático que vivimos". En este sentido, el representante de las Naciones Unidas ha subrayado que "el cambio [climático] está teniendo lugar a una catastrófica velocidad" y que "hay que actuar de manera ambiciosa y decidida". Habrá que ver si sirve de algo que la cumbre de este año sea la más multitudinaria de la historia: se esperan más de 40.000 asistentes, entre los cuales más de un centenar de jefes de estado y de gobierno.
Por otro lado, el arranque de la COP27 ha servido para que la Organización Meteorológica Mundial (OMM) haya sacado a la luz un estudio que evidencia que, debido a los gases de efecto invernadero y la acumulación de calor, los últimos ocho años van por el camino de convertirse en los más cálidos de los que se tiene constancia. En el documento, la OMM alerta de que "los niveles de dióxido de carbono en la atmósfera son tan elevados que apenas podremos limitar el calentamiento a 1,5 °C, el objetivo menos ambicioso del Acuerdo de París". El informe también apunta que desde 1993 se ha duplicado la velocidad a la que aumenta el nivel del mar, que ha subido casi 10 milímetros desde enero de 2020 y ha registrado un nuevo récord este 2022.