Ola de cuentas suspendidas en X por una posible campaña de extrema derecha

BarcelonaDocenas de usuarios de la red social X vinculados con la comunicación han visto en las últimas horas cómo sus cuentas quedaban suspendidas permanentemente y sin previo aviso. Algunos de los perfiles afectados son los delAhora Baleares, el portal Mèdia.cat, la edición balear deEldiario.es, periodistas y divulgadores científicos, especialmente mujeres, aparte de algunos perfiles institucionales del gobierno isleño. Capturas de pantalla aparecidas en el canal de Telegram Unga Reaction, de extrema derecha y negacionista, sugieren que puede tratarse de una campaña de falsas denuncias premeditada, porque algunos usuarios se jactan de haber provocado varias de las suspensiones.

X permite la denuncia de las cuentas que infringen las normas y una acción coordinada podría permitir que una redada de usuarios pueda provocar el bloqueo de cualquier cuenta. Otros usuarios sugieren que detrás de la ola de suspensiones podría haber un fallo técnico, ya que el patrón no es del todo evidente. A última hora de la tarde, parte de las cuentas habían recuperado la operatividad, sin recibir ningún aviso por parte de la red. Y algunos de los usuarios que han vuelto a tener su perfil, lo han hecho con el contador de seguidores y seguidos a cero.

El problema es que X, desde la compra del servicio por parte de Elon Musk, ha visto diezmada a su plantilla en un 75% y el departamento de moderación es uno de los que más han sufrido la tijera. Esto hace que, en estos momentos, los usuarios afectados –que claman que no han incumplido el código de conducta– no hayan recibido ninguna respuesta a su apelación, más allá de un mensaje automatizado que les informa de la suspensión permanente de la cuenta, sin dar opción a réplica o reclamación. EL AHORA y El Periódico de España han intentado contactar con el servicio de prensa de X, que no ha dado ninguna respuesta a la solicitud de información, más allá de un lacónico “Ahora ocupats. Pruébalo más tarde, por favor”, que, sin embargo, es un avance respecto a la respuesta tradicional anterior: el emoji de la tifa.

En el campo de la divulgación científica, algunas de las afectadas son Ana Bayes (matemática), Sara Robisco (experta en IA), Diana Aceves (profesional de la industria tecnológica) y Blanca Molto (activista en favor de la vivienda) social). El perfil Unga Reaction va lleno de contenidos negacionistas de las vacunas y con frecuencia reproduce noticias sobre crímenes donde subraya el origen de quien los perpetra, si es extranjero. El observatorio periodístico Mèdia.cat ya sufrió un ciberataque hace unas semanas, precisamente justo después de publicar el prólogo del nuevo Anuario, donde el presidente de la entidad, Enric Borràs –también subdirector del ARA y otro de los afectados por la suspensión de cuentas–, reivindicaba el periodismo antifascista para hacer frente a la extrema derecha.

“Lo más grave es la inacción por parte de X frente a lo que parece una campaña coordinada. Una inacción que se acerca al colaboracionismo”, detallaba Borràs este miércoles. La directora deAhora Baleares, Cristina Ros, también se ha pronunciado sobre el asunto: “Sorprende e indigna que, sin ningún motivo ni justificación, borren la posibilidad de un medio de comunicación de informar a sus seguidores de la manera rigurosa y respetuosa como lo hemos hecho siempre. Tampoco te dan ningún camino para solucionarlo, lo que es de gran indefensión”.

Esta pasividad de X puede verse como una manera de allanar el terreno hacia uno de los (múltiples) caminos que Musk ha sugerido para salvar una red social que vive una caída libre de la publicidad, su principal forma de financiación. En alguno de sus mensajes –a veces contradictorios o cambiantes– ha expresado que la única forma de luchar contra los bots es introducir una cuota de pago para poder estar en esta red.