Cinco minutos para vender una serie: ¿cómo se realizan las ficciones catalanas?

Barcelona"Esto es un poco como uno speed dating", dice Alícia Teba, que junto a su compañero David Casademunt ha presentado ante varios productores su proyecto de serie, Cuatro asuntos pendientes. La pareja forma parte del grupo de 16 participantes de la tercera edición de Serielizados Kick, la incubadora de series en catalán vinculada al medio digital Serielizados. Esta semana se ha vivido en el CCCB uno de los momentos culminantes de la iniciativa, el pitching, el encuentro en el que los proyectos de series seleccionados por el Serielizados Kick son presentados ante varias productoras con la esperanza de que alguna de ellas se interese y quiera hacer realidad la ficción. Los creadores deben sintetizar el trabajo de meses en cinco minutos –"es casi hacer una reducción de vino", dice Teba– y ésta no es una norma laxa: cuando se avecina el final del tiempo estipulado suena la campana.

"Hoy en día ser guionista es ser escritor y ser vendedor al mismo tiempo. No sé cómo se hacía hace treinta o cuarenta años, pero actualmente, tal y como funcionan las dinámicas de la industria, tienes que aprender las herramientas de saber venderte bien y saber vender bien el proyecto", remarca Casademu El Páramo en Netflix. El guionista y director detalla que desde Serielizados Kick se les ha dado formación para aprender a hacer bien un pitching. Después de la exposición de cinco minutos se abre el turno de preguntas y los productores sentados en la fila 0 –hay representantes de El Terrat, The Mediapro Studio, Suma, Zeta Studios y Funicular Films (productora deEsto no es Suecia), entre otros– plantean las dudas que les han surgido durante las presentaciones. Son preguntas de todo tipo, desde el tono que tendría la serie, hasta quiénes se imaginan protagonizándola oa qué público va dirigida la serie.

Este año el Serielizados Kick ha seleccionado 9 proyectos de entre 80 candidaturas. La serie de David Casademunt y Alícia Teba está pensada para el público familiar, pero no todos los proyectos siguen esta línea y muchos buscan a unos espectadores que podrían considerarse de nicho, como los amantes de la animación para adultos. Una tónica general de la elección de este año es la inspiración en historias personales. Es el caso, por ejemplo, de la propuesta de la actriz Bruna Cusí, que junto a Oriol Puig Playà presenta Frozen eggs, una reflexión sobre la maternidad; o la también actriz Ann Perelló, que trabaja en la serie Desnuda (radiografía de un trastorno). Entre los nombres conocidos de la selección de este año también se encuentran Berta Prieto, Miguel Ángel Blanca y Víctor Diago, que ya trabajaron juntos en Autodefensa y ahora han presentado Segunda temporada.

A la salida del pitching Blanca reconoce que su presentación fue poco ortodoxa. "Hemos intentado que vaya un poco con el estilo de la serie, que es romper estereotipos", dice. Por su parte, Prieto asegura que simplemente han intentado hablar de su proyecto como personas adultas. "¿Por qué para vender algo tienes que hacer superligero el discurso y facilitar las cosas como si hablaras con niños pequeños? Creo que es algo que nos sucede mucho a la hora de comunicar proyectos culturales", remarca. Pese a tener experiencia en enfrentarse al público, Bruna Cusí confiesa que la experiencia de hacer un pitching no es fácil. "Lo he pasado fatal, sobre todo porque nace de una experiencia personal. Una cosa es actuar y hacer un personaje; otra cosa es ponerte tú y decir "yo viví esa experiencia y quiero hacer un proyecto artístico de esto"", dice.

En busca de talento y nuevas voces

Una vez terminado el pitching, siguiendo el símil delspeed dating, es el momento de hacer el match. Interesar a un productor no significa necesariamente que el proyecto se haga realidad. Muchas veces, las productoras acuden a estas citas en busca de talento. "Cuando vas a estas presentaciones, tienes muy claro qué buscan las televisiones y las plataformas. Por tanto, mentalmente ya estás descartando algunos proyectos que sabes que, como productora, no podrás trabajar en el mercado actual. Sin embargo, es cierto que detectas talento y, aunque no sea para el proyecto concreto que han presentado en el pitch, si te parecen talentosos, originales o, de alguna manera, alineados con el talante de la productora, es una oportunidad para conocerlos de cara al futuro y tenerlos identificados", explica Marta Baldó, productora en Funicular Films.

Xavier Cassadó, de siempre pensamos mucho en esta clave, pero la verdad es que estamos abiertos a todo y al pitching se han presentado cosas que no eran comedia que eran muy interesantes", dice Cassadó, quien asegura que cuando participan en estas experiencias lo hacen sin ideas preconcebidas ni buscando nada en concreto.

"Nosotros no sabemos exactamente qué querrá la industria, así que tomamos proyectos que nos parecen sólidos, interesantes y que hablan. Son proyectos que pueden estar en fases diferentes", explica Víctor Sala, codirector del Serielizados Kick junto con Betu Molero. Detalla que la iniciativa es una buena oportunidad para que productoras que normalmente siempre trabajan con la misma gente se abran a nuevas voces, nuevas perspectivas ya producir en catalán. "Nosotros intentamos hacer series en catalán y sabemos que, a veces, para , .Explica que de media se necesitan tres o cuatro años para levantar una serie y, por tanto, los resultados de las tres ediciones que se han hecho hasta ahora se empezarán a ver pronto.