60 años de Les Voltes: la librería catalanista resistente
Cinco presidentes de la Generalitat participarán en el aniversario, el 28 de febrero
GeronaLa librería Les Voltes nació en mayo de 1963 fruto de una iniciativa que impulsaron 43 personas sensibilizadas por la lengua y la cultura catalanas, muchas de ellas provenientes de la Federación de Jóvenes Cristianos de Cataluña, los llamados fejocistas. “El objetivo era reactivar el sentimiento catalanista, que llevaba más de dos décadas dormido en la ciudad por la dictadura”, dice Joan Matamala, presidente de la Fundación Les Voltes e hijo de Feliu Matamala y Teixidor, que durante más de cuarenta años va ser el alma de una librería que está de cumpleaños: celebra 60 años. “Desde el principio, Les Voltes no fue sólo una librería. La parte de abajo era una galería de arte y fue un oasis de catalanismo, en la medida en que se podía en aquellos años. Todo lo que se hacía en el ámbito cultural catalanista, tarde o temprano pasaba por Les Voltes –añade Matamala–. Hay que tener en cuenta que a principios de los años sesenta se publicaban muy pocos libros en catalán”. Matamala también remarca la atención que se puso desde el primer momento al tener una sección infantil "porque los fundadores tenían muy claro que había que introducir a los niños en la lengua catalana".
Tolerada por la dictadura
Pese a que el objetivo de Les Voltes era diáfano, las autoridades no les molestaron excesivamente. “Era un proyecto colectivo que sacaron adelante a gente reconocida y bien posicionada socialmente. Muchos de ellos podría decirse que eran de derechas, entre comillas. Aparte de que el espacio donde está Les Voltes era [y es] propiedad del Obispado de Girona, y eso también ayudó para que los respetaran –explica Matamala–. Además, tuvieron la precaución de constituirse como sociedad limitada, lo que hacía más difícil a las autoridades ir contra los impulsores”.
La librería tiene diversas aportaciones de artistas, como el anagrama que hay en la fachada, obra de Emília Xargay, y sendas pinturas en el interior de Paco Torres Monsó y de Enric Marquès, “que vino de Francia de estranquis. Vino, pintó y se volvió hacia el norte sin que le pillaran”, recuerda Matamala.
Activismo catalanista
En 1982 Les Voltes puso en marcha una iniciativa que hizo que miles de personas de la ciudad y de los Països Catalans se hicieran el carné de identidad catalán. La idea surgió de un cura de Cornellà de Llobregat y llegaron a expedirse 97.000. En la presentación del aniversario, el alcalde de Girona, Lluc Salellas, recordó el martes que de adolescente también fue a hacerse el DNI catalán y remarcó que “Les Voltes es un proyecto necesario que va más allá de la ciudad. Trasciende a las comarcas gerundenses y al resto del país”. En otoño del 2022, la librería se amplió con un nuevo local, el de Les Voltes Educa, una nueva librería situada en la calle Mercaders del Barri Vell de Girona y centrada en fomentar el catalán entre los jóvenes y el mundo educativo.
Celebración de altos vuelos
La celebración del aniversario, que se celebrará el miércoles 28 de febrero en el Teatro Municipal de Girona a las 19 h, contará con la participación de cinco presidentes de la Generalitat: in situ está prevista la presencia de Jordi Pujol, José Montilla y Quim Torra. Artur Mas estará ahí desde Nueva York, donde tiene un viaje institucional agendado desde hace meses, y Carles Puigdemont participará desde Bruselas. El presidente Pere Aragonès no estará por motivos de agenda y lo representará el conseller Joaquim Nadal, que será quien anunciará el primer galardonado con el premio Feliu Matamala, que distinguirá a la persona o entidad que más se destaque en la defensa de la lengua y la cultura catalanas. También habrá una representación teatral a cargo de Martí Peraferrer y se contará con la actuación de Arnau Tordera, del grupo Obeses.
Matamala explicó que ahora han creado la figura del socio de Les Voltes “para afrontar los tiempos actuales, en los que el catalán es más hablado que nunca, en número de hablantes, porque nunca había habido ocho millones de habitantes en el Principado. Pero está también más amenazado que nunca”.