Choque entre Ayuntamiento y Municipales en Girona: la falta de efectivos obliga a reorganizar recorridos y actos

Gerona"Nos hemos encontrado una bomba a punto de explotar", dice Sergi Font, concejal de Gestión de Recursos y Atención a la Ciudadanía del Ayuntamiento de Girona, en referencia al conflicto que enfrenta desde hace algunos años a los últimos equipos de gobierno de la ciudad y el colectivo de la Policía Municipal. El pasado fin de semana, el recorrido de la cabalgata de Reyes tuvo que acortarse porque no había agentes suficientes para cubrir los cortes de tráfico necesarios para seguir el recorrido inicialmente previsto. Para la carrera de San Silvestre fue de un pelo que no tuviera que hacerse lo mismo y había un plan B, por si acaso.

“Nos quejamos por la falta de efectivos y por el incumplimiento del pago de la valoración de los puestos de trabajo”, dice Soraya García, portavoz del sindicato policial SIP-Fepol. “Con la plantilla que tenemos no se llegan a cubrir como deberían todos los eventos de Girona. Y, además, el anterior equipo de gobierno se comprometió a compensar el aumento salarial en ocho años y sólo nos han pagado dos años”, añade García.

Entenderse como sea

El mal ambiente en el cuerpo empezó a visibilizarse en el verano del 2022 cuando buena parte de los agentes decidieron no prestarse voluntarios para hacer horas extras, lo que hizo que ya la anterior alcaldesa tuviera que obligar a a trabajar a los agentes por decreto, como también ha hecho el actual alcalde, Lluc Salellas. "Cuando nos reunimos con ellos, la sensación es que tenían pocas ganas de llegar a un acuerdo", dice Font.

Unos días antes de Navidad, agentes de la policía local protestaron en la plaza del Vino disfrazados de esclavos de la época romana. "Entendemos todos los métodos de protesta, pero algunas escenas no han ayudado a la imagen de la policía local" añade Font. "Pero tenemos que negociar y entendernos a la fuerza", dice el concejal.

“Claro que debemos sentarnos a negociar y construir lazos de confianza entre ambas partes –dice Garcia–. Este conflicto debe acabar ya porque al final el perjudicado es el ciudadano”. El viernes está prevista la primera reunión.

La plantilla de la policía es de 156 agentes, de los que unos 125 están en la calle y el resto realizan otras tareas, como las administrativas. La vigilancia del consistorio ya se ha adjudicado a una empresa de seguridad privada, lo que ha permitido liberar a dos agentes. "Uno de los problemas es que el modelo policial de Girona es del 2010 y en catorce años las circunstancias y la ciudad han cambiado mucho", dice Font, que añade que con la plantilla actual se está un poco por encima de la recomendación de la UE. “Marca 1,44 agentes por cada mil habitantes y en Girona estamos a 1,48”, concluye.