Los cinco incendios del País Valencià ya están estabilizados o extinguidos

ValenciaEvolución favorable de los cinco incendios declarados ayer lunes en el País Valenciano, que ya se encuentran en fase de extinción pese a que el viento de poniente, que sigue soplando con ráfagas moderadas, dejará una nueva jornada de humedades muy bajas y de temperaturas propias de la primavera con máximas que alcanzarán los 25 grados.

A las siete de la mañana, el Ayuntamiento de Valencia y el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat Valenciana han informado que el fuego declarado en el paraje natural del Saler, a pocos kilómetros de la ciudad, se había dado por estabilizado. Pese a la mejora de la situación, permanecen desalojados los cinco edificios evacuados ayer por la proximidad de las llamas. La situación afecta sólo a 35 personas porque muchos pisos ya estaban vacíos, porque son segundas residencias.

Con el fuego declarado ayer, este pinar muy cercano al mar suma ya 17 desde agosto. Según ha informado el Ayuntamiento de Valencia en un comunicado, la media de fuegos entre 2010 y 2023 era de tres al año, situación por la que se da por hecho que la mayoría de los incendios son intencionados. De hecho, en octubre se detuvo a un hombre de 59 años, vecino de la zona, como presunto autor de varios incendios. Tras ponerlo en libertad, el tribunal le prohibió acercarse al pinar.

Este martes también se ha dado por estabilizado, en este caso a las diez de la mañana, el incendio declarado en la zona forestal del Racó, en la localidad de Sella, en la Marina Baixa, y que obligó a desalojar a una veintena de viviendas. En la extinción del fuego trabajan 10 dotaciones de bomberos y tres medios aéreos que, a diferencia de ayer, sí se han podido sumar a las labores de contención de las llamas por la reducción de la intensidad del viento.

En cuanto a los demás incendios, también se ha estabilizado el fuego declarado en una zona de marjal en la localidad de Xeresa, en la comarca de la Safor. Los incendios iniciados al margen de la carretera CV-729 en el municipio de Ràfol de Almúnia, en la Marina Alta, y en un barranco en Simat de la Valldigna, en la Safor, ya se han dado por extinguidos.