Roger Torrent: "El cooperativismo es un modelo que conecta con el ideario republicano y nos ayuda a hacer realidad la transformación verde, social y feminista de la economía"

¿Cuáles han sido los principales hitos alcanzados a lo largo de esta legislatura?

Desde el inicio nos propusimos reforzar el tejido de la economía social y solidaria porque entendemos que es un modelo que conecta con el ideario republicano y que nos ayuda a hacer realidad la transformación verde, social y feminista de la economía. Un tejido desde el que podemos dar respuesta a las necesidades de la sociedad catalana.

En este sentido, hemos consolidado las herramientas ya existentes, que habían demostrado su eficacia, como la “Red de ateneos cooperativos” y los “Proyectos singulares”, programa que hemos reforzado y que ahora prioriza ámbitos estratégicos de transformación social. Y hemos puesto en marcha nuevas. Como el programa "Comunalidades urbanas", ideado para impulsar proyectos de economía local con lógica comunitaria, con participación del movimiento vecinal y asociativo, del tejido cooperativo y del pequeño comercio. O el programa “Pájaro de fuego”, para ayudar a los jóvenes con problemas de salud mental a insertarse en el mundo laboral o formativo.

Y, desde un punto de vista cuantitativo, hemos logrado potenciar y extender el cooperativismo: en enero de este año había 340 cooperativas más que antes de la pandemia, lo que representa un crecimiento de casi el 8% en este período .

¿Catalunya ha destacado estos años por tener un modelo propio y singular de cooperativismo? ¿En qué se basa ese modelo?

En primer lugar, en una larga tradición cooperativista, que, pese a las épocas de oscuridad de las dictaduras españolas, logró arraigar los valores del cooperativismo en la cultura social del país. Se estructura en torno a la "Red de ateneos cooperativos", impulsada por la consejera Dolors Bassa, y que durante el mandato del consejero El Homrani se consolidó como el ecosistema de fomento de la economía social y cooperativa en todo el territorio. Es un modelo basado en la territorialización de su promoción, intercooperación y diversidad de sectores de actividad.

Este año se ha conmemorado el 125 aniversario del cooperativismo en Cataluña, con un congreso el 4 de julio titulado "Evitemos el colapso". ¿Por qué el movimiento cooperativista puede ser respuesta a los retos de la sociedad de hoy y mañana?

Porque aporta un mayor valor social al hecho productivo. Es un movimiento diverso y plural, pero con un elemento común: funciona con lógicas más democráticas, equitativas, solidarias y respetuosas hacia las personas y el medio ambiente. Y en cada crisis económica ha demostrado su resiliencia, ya que la implicación colectiva constituye un valor añadido y otorga a los proyectos una mayor capacidad de resistencia.

Es decir, las cooperativas son una alternativa viable que aportan al sistema económico un tejido productivo fuerte, sostenible y duradero que genera puestos de trabajo de calidad, arraigados en su entorno, arraigados en el territorio. Y lo que es más decisivo: se definen en su actividad por tener unos valores sociales que contribuyen a construir sociedades mejores.