El drástico cambio de actitud de Dani Alves tras salir del baño del Sutton

BarcelonaDani Alves no sale del baño del Sutton donde una chica lo acusa de haberla violado del mismo modo que ha entrado un rato antes. Lo que pasa adentro provoca un drástico cambio de actitud del futbolista. De hecho, después de observar la secuencia de las cámaras de seguridad, los investigadores de los Mossos d'Esquadra lo detectan y lo destacan. Antes de entrar en el baño, Alves mantiene una actitud distendida y festiva. Después, cambia del todo: está hostil, tiene prisa y no se quiere relacionar con nadie. Incluso, sale del baño y se esconde en una zona del reservado donde nadie más lo ve. Ahí, se espera hasta que la víctima y sus dos amigas se marchan y una vez se han ido paga y también se marcha rápidamente. Con un paso más acelerado de la cuenta, pasa justo por al lado de la mujer, que está en la entrada de la discoteca llorando por lo que había pasado dentro del baño. El futbolista no se interesa por ella y sale andando deprisa, una versión que corroboran los vigilantes de seguridad.

El cuarto de hora que pasa en el interior del lavabo lo cambia. Antes baila y abre una botella de cava. Está relajado. Se extralimita a la hora de bailar, tocando los genitales de la víctima y de una amiga suya que, a pesar de que la jueza se lo ha preguntado, ha preferido no denunciarlo también por agresión sexual. Llega un momento en el que el deportista brasileño se aleja del reservado y se dirige hacia una puerta. Según su defensa, la abre y entra en el baño. Según la versión de la víctima, se queda ante la puerta y le dice que vaya. Pero aparentemente nadie sabía que era un baño, solo él.

Este viernes han declarado ante la juez ocho testigos, entre ellos seis trabajadores de Sutton y las dos amigas de la joven. Los trabajadores, según fuentes consultadas por este diario, han reafirmado que no hay ningún cartel que indique que hay un baño detrás de esa puerta. De hecho, hay una acción de una de las amigas que lo certifica: en un momento de la noche y estando ya en el reservado con el futbolista, ella baja hasta el baño general de la pista de baile y hace un rato de cola para poder acceder. Ha declarado que no habría hecho cola si hubiera sabido que había un baño al lado mismo de donde estaba. De este modo, según su relato, la víctima no sabía dónde iba cuando Alves la llama. Simplemente, asegura, pensaba que salían a una terraza a fumar. Por el contrario, entró en un baño de pequeñas dimensiones.

Declaraciones

De momento, la defensa de Alves, pilotada por el abogado Cristóbal Martell, se centra en todo aquello que pasó antes de entrar en el baño y obvia el cambio de actitud posterior. Martell intenta desmentir a la víctima diciendo que el ambiente era festivo y no incómodo por los tocamientos del futbolista. Este viernes, sin embargo, las dos amigas se han ratificado en su versión de los hechos. Es decir, han afirmado que el futbolista se extralimitó haciendo tocamientos. Un camarero también ha contradicho la versión del deportista brasileño y ha avalado la de la chica: ha dicho que fue el amigo de Alves a petición del futbolista el que le pidió que fuera a preguntar a las chicas si querían entrar en el reservado. En todo momento el exblaugrana mantuvo que fueron ellas solas.

De hecho, los ocho testigos se han ratificado en la versión de los hechos que habían dado ante los Mossos, que refuerza más el relato de la mujer que el de Alves. Ningún testigo vio con sus ojos qué pasó dentro del baño, pero sí que estas ocho personas pueden explicar qué pasó antes y después. Y certifican, en buena medida, el cambio de actitud del futbolista, que ya hace tres semanas que duerme en la prisión de Brians 2. Su defensa ya ha presentado un escrito para que salga, intentando contrarrestar el riesgo de fuga y la gran capacidad económica del futbolista. Tanto la defensa de la víctima como la Fiscalía ya están preparando sus escritos para posicionarse, de nuevo, sobre la situación preventiva del exblaugrana. Será la Audiencia de Barcelona quien lo decida.