Los jugadores del Old Christians Club, en una imagen previa al viaje en que la mitad del equipo perdió la vida. A bordo del avión estrellado iban 45 personas, entre pasajeros y tripulantes. El Servicio Aéreo de Rescate chileno les dio por muertos a los diez días de buscarlos.
Las imágenes que se hicieron los supervivientes del accidente aéreo de los Andes en 1972
Las fotografías reales de la tragedia del avión uruguayo en la que se inspira la película 'La sociedad de la nieve', del director J.A. Bayona
BarcelonaEn 1972 el avión en que viajaba un equipo de rugby del Uruguay se estrelló en medio de los Andes. Esta historia, tan conocida, vuelve a estar de actualidad gracias a la película La sociedad de la nieve, dirigida por JA Bayona, que recrea la odisea de los supervivientes que pasaron 72 días de infierno y se vieron obligados a practicar el canibalismo para sobrevivir. Estas son las fotografías reales de una historia extrema que se ha llevado al cine y a la literatura en diversas ocasiones.
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Un equipo de rugby
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Fairchild 571
El 13 de octubre de 1972 un avión Fairchild 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya se estrelló en la cordillera de los Andes. El mal tiempo y una lectura incorrecta de los aparatos de navegación provocaron que el piloto iniciara el descenso hacia el aeropuerto de Curicó antes de tiempo y el avión se topó con las montañas, donde se le perdió el rastro.
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El valle de las lágrimas
Una de las fotografías tomadas por los supervivientes de los restos del avión Fairchild 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya, en el lugar que los supervivientes bautizaron como “el valle de las lágrimas”.
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'La sociedad de la nieve'
Juan Antonio Bayona, con la colaboración de Netflix, ha llevado a la pantalla la odisea de supervivencia extrema de los pasajeros del vuelo 571 de la Fuerza Aérea del Uruguay que se estrelló en el corazón de los Andes en 1972. La peripecia fue llevada al cine por primera vez en 1995 en clave hollywoodiana en Viven, y ahora el cineasta barcelonés ha adaptado la novela homónima de Pablo Vierci.
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Una carta
Fernando Parrado y Roberto Cannessa llevaban con ellos una carta cuando caminaron diez días a través de la cordillera de los Andes para buscar ayuda. La nota, que lanzaron con una piedra al otro lado de un río, fue leída con incredulidad por Sergio Catalán, un campesino que fue la primera persona con la que se encontraron: “Vengo de un avión que se ha estrellado en las montañas. Soy uruguayo. Llevamos diez días caminando. Quedan otras catorce personas en el avión. También están heridos. No tienen nada que comer y no pueden moverse. No podemos andar más. Por favor, ven a buscarnos”.
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La incredulidad de un campesino
Los dos hombres que caminaron diez días para buscar ayuda eran Fernando Parrado y Roberto Canessa, que aparecen sentados en la fotografía. Con ellos aparece, de pie, el campesino Sergio Catalán Martínez, que fue quien les dio comida por primera vez des del accidente. Esta es una de las primeras fotos que se hicieron una vez rescatados.
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Diciembre de 1972
Diciembre de 1972. Los supervivientes del desastre saludan al helicóptero de rescate, tras soportar dos meses en medio de la cordillera de los Andes sin alimentos.
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El rescate
Supervivientes del desastre, en los restos del avión destrozado, después de que los servicios de rescate llegaran al lugar donde se encontraban.
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Cannesa y Parrado
Roberto Canessa, uno de los supervivientes, recibe asistencia médica después de haber permanecido dos meses en el improvisado campamento entre los restos del avión, y de haber caminado con Fernando Parrado durante diez días por las cumbres nevadas, soportando unas condiciones extremas.
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Alimentarse de carne humana
El jugador de rugby uruguayo Fernando Parrado aparece en la foto con dos soldados chilenos que participaron en el rescate, después de dos meses de permanencia en las montañas, soportando unas circunstancias extremas, que les obligó a comer carne humana para sobrevivir.
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La alegría del regreso
La prensa se hizo eco del increíble rescate, y las imágenes dieron la vuelta al mundo. Arriba a la izquierda, Antonio Vicentín, uno de los supervivientes, abraza a su tía al regreso a Uruguay. En la foto de al lado, José Luis Inciarte y Alfredo Delgado rinden homenaje desde su estrado al radioaficionado uruguayo que mantuvo contacto durante tres días con unos colegas chilenos para salvar a los supervivientes. Abajo a la izquierda, Ramón Sabella, José Luis Inciarte y Alfredo Delgado sentados en el estrado durante la conferencia de prensa en el colegio Stella María. Y, por último, Carlos Páez y Eduardo Strauch, explicando su experiencia de aquellos 70 días.