BarcelonaDe la humedad de Luisiana a la aridez polar de Alaska. Han pasado diez años desde que True detective aterrizó en televisión y fue alabada como una de las mejores ficciones del momento. Después de la impactante primera temporada protagonizada por Woody Harrelson y Matthew McConaughey, la serie cayó casi en la irrelevancia con las siguientes entregas. Ahora, la ficción busca reavivarse con una nueva dosis de episodios que cambia la masculinidad omnipresente de sus inicios por un reparto marcadamente femenino liderado por Jodie Foster. Casi cinco años después de la última entrega, la nueva propuesta de True detective llega este lunes a HBO Max y Movistar+. La serie está formada por seis episodios que se estrenarán semanalmente.
Desapariciones, ambiente perturbador y asfixiante y unas gotas de misticismo y fenómenos sobrenaturales. Los elementos fundacionales de la serie se mantienen, trasladados ahora a una Alaska que vive permanentemente en una oscuridad en sintonía con el estado de ánimo de las protagonistas –los capítulos se rodaron en Islandia–. La actriz de Taxi driver interpreta a la agente Liz Danvers, que tiene que resolver la desaparición de ocho hombres de la estación de investigaciones árticas Tsalal. El único rastro humano encontrado en la estación es una lengua cortada, que parece pertenecer a una mujer. El descubrimiento llamará la atención de otra agente, Evangeline Navarro (Kali Reis), obsesionada con un caso irresuelto del pasado.
Más allá del reparto, una diferencia fundamental entre esta temporada y las anteriores es la ausencia de Nic Pizzolatto como guionista. El creador de la serie ha cedido las riendas de su universo a la mexicana Issa López, que es la guionista, directora y showrunner de esta cuarta entrega, que devuelve True detective al desasosiego y la extrañeza de su célebre primera temporada (para acabar de remarcar el tono, la canción elegida para los títulos de crédito inicial es Bury a Friend, de Billie Eilish). Con ninguna experiencia en televisión, López presentó a la HBO una historia compleja influenciada por La cosa, de John Carpenter, película ambientada en la Antártida, y 30 días de oscuridad, un cómic de vampiros situado en Alaska. La mexicana estaba convencida de que HBO no daría luz verde a su proyecto y, por eso, presentó la propuesta más arriesgada que pudo imaginar: "un misterio existencial" localizado en la zona más aislada de Alaska.
Primera serie en años
Hasta ahora, a nivel televisivo Jodie Foster ha tenido tendencia a estar más detrás de la cámara que delante. Ha dirigido episodios de series como Orange is the new black, House of cards o Black Mirror, pero como actriz no se ha dejado ver mucho (su última aparición televisiva es de los años 70). Para su regreso a la pantalla pequeña, Foster ha optado por un personaje que podría ser pariente de Clarice Starling de El silencio de los corderos, una mujer fuerte y dura que esconde una oscuridad en su interior, como el resto de los habitantes del nuevo True detective.
Aunque durante la promoción de la serie Foster ha evitado hacer comparaciones entre Clarice Starling y la agente Danvers, sí ha hablado de las similitudes que tienen El silencio de los corderos y True detective en cuanto al tono. "Esta serie se sitúa en el marco de la ficción de género, ya sea el género de terror, sobrenatural o el thriller. Pero buena parte de la exploración que se hace del terror se hace a través del drama psicológico, del drama íntimo de estos personajes", destaca la actriz, ganadora de dos Oscar.
Con 61 años y un interés en el mundo de la interpretación que ha ido fluctuando, como ella misma ha explicado, Foster asegura que True detective es la serie con la que se empezó a interesar por el mundo del streaming. "Fue el inicio de mi adicción. Una de esas cosas que vi en maratón y me encantó y a la que siempre vuelvo", confiesa.
Mentora de jóvenes actrices
Foster asegura que la actuación no es una de sus prioridades. En cambio, confiesa que disfruta intentando ayudar a jóvenes actrices a encontrar su sitio en la industria, sobre todo en los inicios de su carrera. De esta forma, puede compartir lo que ha aprendido a lo largo de los más de 50 años que lleva en Hollywood (debutó con seis años). "Tienen que aprender a relajarse, a no pensar demasiado, a encontrar lo que les conviene, que es mucho más divertido que ser el héroe de la historia, con toda la presión que esto conlleva", explica.
Una de las actrices a las que ha tendido la mano es la británica Bella Ramsey, protagonista de The last of us. Foster eligió a la intérprete no binaria para que hiciera su presentación en el acto Women in Hollywood (Mujeres de Hollywood), organizado por la revista Elle.