Si en casa os inventáis unas normas propias para los juegos, lo hacéis bien. “Estáis fomentando la creatividad, que justamente es lo que queremos impulsar los centros educativos porque es un objetivo básico para que los niños afronten el futuro”, afirma Christian Negre, docente de la Escola Pia de Calella. Las homerules (las normas de casa), como se conoce a la corriente que fomenta que las familias inventen normas nuevas para los juegos, se dan especialmente en los juegos tradicionales. “Es así porque la normativa de estos juegos es tan básica que permite que cada cual pueda cambiarlas, innovar y repensarlas”, dice Negre. Sobre los juegos básicos, el profesor señala que siempre, y en cualquier lugar, podemos jugar con las criaturas. Por ejemplo, podemos jugar al tres en raya solo dibujando un tablero en el suelo y usando piedras, chapas u hojas. ¡La imaginación al poder!
Los juguetes más deseados
Más allá de mesitas, consolas y móviles, ¿qué juguetes gustan a las criaturas?
En un mundo dominado por la tecnología, curiosamente el Monopoly continúa siendo uno de los juegos más buscados por Navidad. El Monopoly y también el Party & Co, el Dobble o el Jungle Speed. Es decir, los juegos que reúnen a toda la familia en la mesa continúan encabezando muchas cartas a los Reyes. Junto a estos juegos también están los educativos, que estimulan la lógica y la intuición, como son el Dixit, el Pictionary, el Catan o el Pasapalabra, y los puzzles de tres dimensiones. Así lo asegura la plataforma de venta en línea Amazon, que ha analizado cuáles son los juguetes más vendidos en su catálogo y ha hecho un ranking de las 100 primeras. Está claro que los datos no pueden convertirse en categoría, pero coinciden con tendencias que la pandemia también dejó al descubierto. Es decir: los juegos de mesa continúan siendo los grandes triunfadores en todas las épocas del año.
Aquí, además, se da el caso de que, esta Navidad, las familias tienen previsto gastar más en juguetes respecto a otras regiones del Estado, según un estudio de los supermercados Aldi, que sostiene que “más de la mitad de las familias catalanas gastará en juguetes entre 50 y 200 €; concretamente un 22% tienen previsto gastar entre 50 y 100 € y un 35% entre 100 y 200 €”. El estudio de la cadena de supermercados, que también ha apostado por la venta de juguetes para esta campaña de Navidad, también indica que las familias tienen en cuenta la edad recomendada del juguete, la calidad y que sea educativo. “Además, dos terceras partes de los habitantes del Estado se fijan en el origen o en los certificados de sostenibilidad”, aseguran.
Tecnología vs. tradición
Los juguetes tecnológicos conviven con los educativos y con los juegos más tradicionales, entre los cuales se encuentran muñecos y muñecas, como el Nenuco, de la empresa Famosa, que sigue en buena forma y ha cumplido 42 años de existencia. Famosa también es la creadora de otras muñecas de renombre como Nancy o las Barriguitas, que han formado parte de los ratos de ocio de varias generaciones de niños y niñas. “Las muñecas Nenuco continúan reproduciendo los roles del día a día que las criaturas imitan”, explica Irene Sotillo, directora de marketing de Famosa, y esto puede explicar que sigan ocupando un espacio en las cartas a los Reyes de las criaturas. Aun así, son juguetes que se tienen que ir adaptando a los nuevos tiempos, y por eso se van reinventando con nuevos modelos menos sexistas y más pensados para que puedan jugar con ellos niños y niñas.
Otra de las marcas tradicionales que preparan la campaña de Navidad con novedades es la compañía danesa Lego, que ha inaugurado este otoño una tienda de 800 metros cuadrados en el paseo de Gràcia de Barcelona. El establecimiento permite interactuar con sus juguetes, cosa que no sucede con otros establecimientos de la marca en Catalunya. Entre todas las construcciones posibles se puede resaltar una máquina de escribir que se vende desmontada y que se puede construir pieza a pieza hasta que el teclado, el carrete y la manecilla simulen con exactitud las antiguas máquinas de escribir.
Y entre los regalos recomendables para los adolescentes, ligados con el fomento de la lectura, están los libros digitales. La marca Kobo, creada por FNAC, acaba de sacar al mercado unos libros digitales (los Kobo Sage) que también incorporan tecnología Bluetooth para escuchar audiolibros. Otro de los modelos, el Kobo Elipsa, permite escribir apuntes y notas a mano y convertirlas después en texto mecanografiado gracias a un botón del libro digital.
La neurociencia asegura que la capacidad de jugar está en la parte interna del cerebro, junto con las otras funciones básicas de los humanos, que son comer, dormir y reproducirnos. “Por lo tanto, podemos decir que el juego nos define como personas”, explica el docente de las Escolas Pías de Calella Christian Negre, que se confiesa un apasionado del aprendizaje basado en juegos. De hecho, el maestro asegura que en un aula con niños “se ve clarísimamente que con el juego exploran el entorno, que aprenden a persistir, a socializarse y a entender la complejidad”. Negre también indica que el juego forma parte de nuestra cultura, y “hay una teoría que sostiene que el hecho de que los humanos jugáramos hizo aparecer la cultura”. Si la afirmación se considera desmesurada, “lo que es cierto es que las primeras civilizaciones están asociadas a juegos, concretamente a juegos de mesa”. Christian Negre afirma que los juegos tradicionales, como también los materiales nobles (madera, papel y cartón), se están revalorizando, a pesar de la competencia que les han supuesto en los últimos años los juegos tecnológicos.