El bolsillo

El milagro de llegar a fin de mes

Andrei Boar analiza el impacto de los impuestos en plena crisis de precios

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BarcelonaQue los precios son cada vez más altos lo ve todo el mundo. El freno de la inflación en el 4% parece más un dato estadístico que una realidad. Según el Banco de España, el 10% de las familias (1,6 millones en todo el Estado) no llegan a fin de mes, con un crecimiento del 30% respecto al año anterior. Un dato estratosférico que irá a peor.

En primer lugar, 14 millones de personas en España tienen hipoteca. En el último mes, el Euríbor se ha frenado con el paro de la subida de tipos, pero las hipotecas variables no paran de subir. Parece que estamos en el pico, pero, de momento, hay cuotas que prácticamente se han duplicado respecto a hace dos años. Actualmente, el 45% de la renta familiar se destina a pagar la hipoteca y sí, los intereses volverán a descender en 2 años, pero de poco consuelo sirve este dato hoy.

Por tanto, sólo nos queda un 55% por sobrevivir, sabiendo que los alimentos también están subiendo. En este contexto, se están aprobando estos días los presupuestos municipales con fuertes incrementos de impuestos y tasas en todo el territorio. Por ejemplo, en Reus han subido el IBI un 12,5%, la tasa de recogida de basuras un 14% y la tasa de las terrazas un 40%. Todo ello, "por necesidades de financiación obligadas por el contexto económico". Es decir, necesitamos subir los impuestos porque no cubren el gasto que tenemos. En este punto cabe preguntarse: ¿y las familias sí? ¿Qué buen momento para aumentar los impuestos municipales a familias y empresas, verdad?

Lo que cuento no sería un problema si los sueldos también subieran. Pero mientras el aceite de oliva dobla su precio o los impuestos suben dos cifras, los sueldos privados han aumentado un 3,16% en el 2023. Con todo, ¿qué nos queda por vivir? Y no me digan que los “gastos hormiga” son la culpa, como se ha hecho viral en la última semana en las redes sociales.

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