"Antes las mujeres ciclistas no existíamos, ahora queremos ganar"
El Massi-Tactic, único equipo ciclista catalán de primer nivel, encara su cuarta temporada
GironaLlueve en Girona y la gente se esconde en los portales. "A las compañeras de equipo que vienen del norte de Europa este clima les parece tropical, cuatro gotas. Hace poco fui a los Países Bajos y cuando cae un temporal, se ponen ropa encima y hacia el trabajo, encima de una bicicleta, claro", explica Mireia Benito, una de las mejores ciclistas catalanas del momento. Mireia forma parte del Massi-Tactic, el único equipo catalán en la élite del ciclismo. "¿Sabes cuántas veces hablando con gente del ciclismo de nuestro país oigo que habría que apostar por crear un equipo profesional catalán? Y yo les digo: «Si ya existe, ¿por qué no apostáis por nosotros?»", dice Sergi Güell, el presidente del CC Baix Ter de Torroella de Montgrí, club del cual depende el Massi-Tactic. En su tercera temporada como equipo de la categoría UCI Continental, las gerundenses se proclamaron campeonas por equipos e individuales de España y de Catalunya. Además, subieron a diferentes podios de carreras de la UCI. "Esta última temporada ha sido excepcional, especialmente si comparamos nuestro presupuesto con el de otros equipos. Nos hemos consolidado como el mejor equipo español después del Movistar. Ahora estamos siempre entre el top 20 del ranking mundial, hecho que nos da todavía más visibilidad. Pero queremos más", explica Sergi Güell. Mireia dice que sí con la cabeza. Lo sabe bastante bien, porque está lista para hacer grandes sacrificios.
"Esta es la tercera temporada del Massi-Tactic. La primera fue de presentación, en 2019. La segunda fue aquella de la pandemia y la tercera, la de la consolidación. Nos habíamos marcado tres años para valorar si el proyecto era viable. El primer año ya se vio que sí. Por suerte tenemos buenos compañeros de viaje", explica, en referencia a marcas como Buff, que ayudan a sacar adelante un proyecto que en los últimos años se ha visto compitiendo contra gigantes. "El ciclismo femenino está cambiando muy rápido. Hace poco no había categoría World Tour. Y ahora muchos equipos masculinos que no tenían equipo femenino lo han creado, como Movistar y Cofidis. España es el país del circuito UCI con más equipos femeninos, hay 9; cuando, de hecho, no hay tantas ciclistas. Se construye la casa por el tejado", explica, recordando cómo su caso es diferente. El CC Baix Ter ha empezado desde la base, con gente joven, con un primer equipo femenino que eran apenas tres chicas hace unos años. La primera temporada, toda la plantilla del Massi-Tactic era española, pero la competencia de nuevos equipos ha hecho que haya que encontrar corredoras de fuera, sin dejar de cuidar la base. Para poder competir, el Massi-Tactic recluta corredoras extranjeras con el reclamo de vivir en Girona, destino privilegiado para el ciclismo, y poder competir en el calendario de la UCI. "Para la próxima temporada llegan corredoras que han sido campeonas de México, Ecuador o Polonia", dice Sergi. "Podemos incorporar a corredoras que buscan brillar en Europa provenientes de América, por ejemplo. Las podemos incorporar a coste cero, pero cuando muestran su potencial, los equipos más potentes las acaban fichando", admite, y añade: "A las marcas que nos ayudan, como Massi, Tactic o Buff entre otras muchas, les va bien tener corredoras de fuera para promocionarse".
Pocas ayudas, pero cada vez mejores resultados
En tres años, el único equipo ciclista catalán de primer nivel no ha dejado de mejorar. "Pero levantamos más pasión nosotros cuando vamos a Bélgica, donde tienen pósteres de nuestro equipo y firman autógrafos, que no si el mejor equipo femenino del mundo visita Catalunya", dice Sergi. Mireia no puede evitar añadir que "les tocarían el claxon en la carretera pidiendo que dejen pasar". Nacida en el Penedès, Mireia llegó al ciclismo casi de casualidad, porque solía jugar a baloncesto. Pero le recomendaron hacer ciclismo mientras estudiaba biología molecular. En tres años, pasó de empezar a competir encima de una bicicleta a ser tercera en los campeonatos de España. "El primer día me descolgué al llegar al primer puente que cruza una autopista", bromea. Ahora colecciona podios. "Ser ciclista no es fácil. Muchas mujeres se cogen dos años de excedencia para vivirlo y después lo dejan", explica. Este año, ya con la carrera acabada y dos másteres hechos, ha decidido que se dedicará solo al ciclismo, aunque sea un sacrificio económico. "No te dan ni ayudas económicas ni te cambian la fecha de un examen cuando tienes una carrera importante. Pero después todo el mundo quiere que ganes. Me gustaría que cogieran a 20 chicas y les pagaran sueldo todo un año solo para entrenarse. Ya verías cómo darían el salto de calidad. Aquí recibes pocas ayudas aunque seas ciclista de primer nivel", explica. Esta próxima temporada, pudiendo entrenarse y descansando bien, sin pensar en exámenes o hacer tarde en el trabajo, Mireia aspira a dar un salto adelante. Y quién sabe, llamar la atención de un equipo extranjero, donde sí que se puede vivir del ciclismo femenino. "Cuando compites en Bélgica o los Países Bajos es como otro mundo. Hay cultura de la bicicleta, cultura de ciclismo. Aquí hay una cierta mejora a nivel de consideración, pero estamos muy lejos de la normalización como tal. Ahora les empieza a sonar el ciclismo femenino. Antes las mujeres ciclistas no existíamos. Ahora queremos ganar carreras, queremos más. Y ya nos conocen un poco, pero muchos no tienen claro el trabajo que supone si queremos competir en estas carreras". Sergi bromea: "Es como ir con un Seat a la Fórmula 1".
El Massi-Tactic encara la cuarta temporada con el equipo cerrado. De nuevo, con muchas corredoras de fuera y tres catalanas, Mireia Benito, Mireia Trias y Martina Moreno. "Nos queremos consolidar, ser un equipo respetado. Nos gustaría poder ganar alguna carrera por equipos", dice Güell, que confía en ver en los próximos años un crecimiento tanto en pruebas como en ayudas. "Ahora vuelve un Tour de Francia femenino. Y tenemos la ReVolta, la Volta Ciclista femenina, que es uno de un día, pero estoy seguro que podrá ser de una semana en algún momento", razona. El Massi-Tactic, de hecho, ganó la clasificación por equipos de la ReVolta de 2011 por delante del Movistar, con la noruega Vita Heine acabando segunda y Benito, cuarta. "Cuando haces una carrera como la ReVolta, se apuntan 70 chicas. Otras veces las chicas tienen que competir en critériums con júniors masculinos. Y se apuntan 10 mujeres. ¿No ven que hay un problema? La de veces que dentro del piloto te dicen cosas como «Aparta, niña». A mí no me afecta, pero una chica que empieza podría tirar la toalla. Nos hace falta un mejor calendario", defiende Mireia. Pero siempre, mirando hacia el futuro: "A pesar de tener menos ayudas que equipos de fuera y que aquí todavía nos miran de manera extraña por querer ser ciclistas, cada año tenemos mejores resultados. Ahora queremos más". El Massi-Tactic no se para, mientras cada vez más jóvenes catalanas sueñan en ser como Mireia. Solo en Girona ya hay más de 10 escuelas de ciclismo, dos con su sección únicamente femenina y las otras mixtas. "Y las niñas que entran en el club Baix Ter saben a dónde quieren llegar: al Massi-Tactic", explica Sergi mientras fuera continúa lloviendo. Pero Mireia saldrá a rodar. No le asustan cuatro gotas, ella que ha competido en Bélgica, superando barro, adoquines y tormentas.