Terry Bender, fotografiada con su gato, es una de las habitantes del lugar, los orígenes del cual se remontan a la II Guerra Mundial. Aquel año el ejército de los Estados Unidos construyó una base militar enlazada con un puerto por vía férrea con Anchorage, con la idea de que hiciera de conexión para los miembros de las fuerzas armadas desplazados a Alaska.
El peculiar pueblo de Alaska en el que todo el mundo vive en un mismo edificio
En una ubicación remota del golfo de Alaska, un enorme inmueble de 14 plantas acoge a los más de doscientos habitantes de un pueblo

Vivir bajo el mismo techo que el resto de habitantes de vuestra población puede parecer una idea peculiar, pero es la realidad de los residentes de la pequeña ciudad de Whittier, en Alaska. Casi todos ellos –más de 200– viven en un bloque de pisos llamado Begich Towers, rodeado de montañas y del mar. El lugar está tan aislado que solo se puede acceder a través de un túnel unidireccional de 4 kilómetros, el más largo de Norteamérica.
Utilizado como base militar hasta 1960, en el edificio se establecieron varias familias de la zona cuando su titularidad fue transferida a la administración civil.
La edificación está diseñada para que se pueda llegar a cualquier punto sin salir a la calle, para evitar las bajas temperaturas invernales. Esto permite a Wayne Chen, que regenta un bar en los bajos, tener clientela todo el año.
La mayoría de los habitantes trabajan en el puerto, en el mantenimiento de las calles o en el mantenimiento del túnel.
Jennifer Rogers, Nathan, Naomi y Sammy son algunos de los habitantes de las Begich Towers, en Whittier.
La industria pesquera es el principal motor económico de Whittier. Hay una fábrica de conservas donde también trabajan personas que, por temporadas, amplían el vecindario. En los últimos años el turismo se ha convertido en una fuente de ingresos adicional.
Pauli Frederickson es uno de los habitantes de la ciudad, donde hay un departamento de policía, un minimercado, una oficina de correos, un gimnasio, una iglesia, una farmacia, un bar e incluso un centro médico.
Los pisos 13 y 14 de las torres son un hotel, abierto todo el año.