Violencia sexual

Piden 15 años para el acusado de agredir sexualmente a una menor y dejarla en un banco en Cerdanyola

Los hechos ocurrieron la noche de la castañada del 2022, cuando el hombre estaba en semilibertad por otro delito sexual

BarcelonaLa Fiscalía pide 15 años de cárcel para un hombre acusado de agredir sexualmente a una menor y dejarla semiinconsciente en un banco, de madrugada, en Cerdanyola del Vallès (Vallès Occidental). Todo ocurrió la noche del 31 de octubre al 1 de noviembre del 2022, cuando ella tenía 15 años y él 47. La chica había acudido a una fiesta para celebrar Halloweeny al regresar a casa discutió con sus padres, que la regañaron porque había llegado más tarde de lo acordado. Entonces la joven se fue de casa y sus padres la estuvieron buscando durante horas, hasta que los Mossos d'Esquadra les avisaron de que le habían encontrado y ella misma explicó que le habían agredido sexualmente.

El acusado ya había sido detenido dos veces antes por delitos sexuales, y en ese momento estaba en semilibertad cumpliendo una condena de siete años de cárcel por una agresión sexual en el 2015. Según las acusaciones, tras huir de casa, la chica fue a parar en un bar, donde también estaba el acusado. El hombre presuntamente le ofreció whisky hasta tal punto que ella acabó mareada y sin poder mantenerse de pie. Él le animó a salir fuera y la llevó de la mano hasta el callejón que hay detrás del local, donde presuntamente la agredió sexualmente. La chica quedó semiinconsciente, y cuando despertó todavía le vio allí, mojándole la frente con agua. El hombre la llevó a un banco y le dio su móvil: "Para que no te lo roben", le dijo.

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Este lunes ha comenzado el juicio, que continuará el viernes en la Audiencia de Barcelona, ​​y la chica, que aún es menor de edad, ha declarado ante el tribunal a puerta cerrada y acompañada de su madre. También declararon los padres, que explicaron que tras la discusión con la hija la localizaron gracias a una aplicación a la que tenían acceso constante a su ubicación. La encontraron en un parque donde había una fiesta, pero cuando la chica vio a su madre se escapó y apagó el móvil para que no la localizaran. Fue más tarde cuando, presuntamente, se habría cometido la agresión sexual.

Lo identificó sin dudas

Los agentes que se encargaron de la investigación coincidieron en que la joven reconoció al acusado sin duda alguna cuando le enseñaron fotos de diferentes hombres a partir de la descripción que ella había dado. En el local donde estuvieron bebiendo esa noche había varios testigos que conocían al acusado porque era cliente habitual, pero todos negaron que hubieran visto a la chica esa noche. En concreto, testificaron la camarera del bar, el propietario y un amigo del acusado.

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La abogada del acusado ha aprovechado varias preguntas para poner en duda la edad de la joven, que nació en Brasil y sus padres adoptaron cuando tenía nueve años. La defensa preguntó a los padres si cuando la adoptaron recibieron algún certificado que acreditara la fecha de nacimiento, y también preguntaron a los agentes si lo contrastaron. Tanto los padres como la policía afirmaron que tenían confirmada la edad de la menor. Se da la circunstancia de que la chica tenía 15 años en el momento de los hechos, una edad que está justo por debajo de la edad de consentimiento, que la ley fija en los 16 años. Por tanto, por debajo de esta edad cualquier contacto sexual se considera una agresión desde el punto de vista legal.

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