El príncipe Enrique echa leña al fuego: nuevas acusaciones contra su padre, su hermano y Camila

BarcelonaEl conflicto entre el príncipe Enrique y la familia real inglesa parece no tener fin. En una entrevista a la cadena británica ITV con motivo de su autobiografía, Spare, el duque de Sussex ha vuelto a criticar a su padre, el rey Carlos III; a la reina consorte, Camila, y a su hermano, el príncipe Guillermo. A pesar de todo, ha asegurado que tiene la esperanza de poder reconciliarse con todo ellos, siempre que antes rindan cuentas por su parte de responsabilidad en el conflicto familiar. "El silencio solo sirve para que el abusador siga abusando", ha dicho Enrique para defender su autobiografía y su gira de entrevistas.

A la espera de saber si podrán hacer las paces, Enrique ha compartido todo tipo de detalles sobre cómo y por qué se ha deteriorado la relación con su padre y su hermano y ha criticado supuestos vínculos entre su familia y los tabloides. "Si miramos la relación entre la familia y la prensa amarilla, algunos familiares han decidido acostarse con el diablo para rehabilitar su imagen", ha asegurado el duque de Sussex. "El momento en el que esta rehabilitación se hace en detrimento de otros, yo y otros miembros de mi familia, para mí se ha cruzado una línea roja", ha dicho.

En este sentido, insinúa que la mujer de su padre, la reina consorte Camila, habría filtrado información privada a la prensa, como por ejemplo detalles sobre los encuentros que mantuvo tanto con él como con su hermano Guillermo antes de casarse con Carlos III. "Empezaron a aparecer historias en la prensa sobre sus encuentros con Guillermo, informaciones que incluían detalles muy precisos y que mi hermano no había explicado. Solo podían haber sido filtrados por la otra persona presente en el encuentro", ha remarcado. En sus memorias, Enrique especifica que, después de estos encuentros, Camila puso en marcha una estrategia de largo recorrido que tenía como objetivo final casarse con Carlos y acceder a la corona. El príncipe confiesa que cree que este plan contaba con el beneplácito de su padre.

Sobre la relación tóxica entre su familia y la prensa, Enrique asegura que a los Windsor no les interesa cambiarla, puesto que de alguna manera los beneficia. "La gente empieza a entender que las fuentes reales no son personas desconocidas. Es palacio pasando información a la prensa sin dar nombres para cubrirse las espaldas", ha dicho.

Enrique ha aprovechado la entrevista para negar que él y su mujer acusaran a la familia real de actitudes racistas en la entrevista que concedieron a Oprah Winfrey en 2021. "La prensa británica lo dijo. ¿En algún momento Meghan dijo: «Son racistas»?", ha respondido Enrique a la pregunta del periodista Tom Brabdy sobre esta cuestión. "Creo que una cosa es racismo y la otra un sesgo inconsciente... Son cosas diferentes", ha dicho, a la vez que ha remarcado que su familia no es racista.

Guillermo y Enrique, una relación rota

El duque de Sussex ha acusado a su hermano y a su mujer Kate de no haber acogido bien a Meghan Markle. "Creo que no esperaban que yo tuviera una relación con alguien como Meghan, que tiene una carrera de éxito", ha detallado el príncipe, que ha confesado que siempre esperó que podría hacer equipo con su hermano, su cuñada y su pareja.

Durante la entrevista, Enrique ha asegurado que ya no confía en su hermano Guillermo. Ha explicado que durante el funeral de su abuelo, el duque de Edimburgo, Guillermo le prometió, por "la vida de su madre", que deseaba que fuera feliz. Enrique, sin embargo, asegura que se le rompió el corazón cuando se dio cuenta de que ya no podía creer a su hermano. El príncipe Enrique detalla que la referencia a su madre es una especie de código secreto entre los dos hermanos, pero que ahora la confianza está rota.

Uno de los detalles más surrealistas de la entrevista es la confesión de Enrique de que él y su hermano estuvieron enfadados durante una semana por culpa de una barba. El duque de Sussex pidió permiso a la reina para mantener su barba el día de su boda, petición a la que la monarca accedió. Esto hizo que Guillermo se enfadara, puesto que él fue obligado a afeitarse el día de su enlace con Kate. "Creo que tiene que ver con la competición que se establece entre el heredero y el relevo, pero también entre un hermano mayor y un hermano pequeño", ha remarcado.

La entrevista a la ITV es la primera de las muchas que tiene programadas el príncipe Enrique. En paralelo al programa británico, en Estados Unidos se ha emitido otra entrevista dentro del espacio 60 minutos en la que ha insistido en muchos de los puntos explicados en ITV.