Renovado desafío del príncipe Enrique contra el sensacionalista 'Daily Mail'
El duque de Sussex no se entrevistará con su padre, el rey Carlos III, que alega que está muy atareado
LondresDesafío de Enrique a sus enemigos entre la prensa sensacionalista británica, que no son pocos. El príncipe, y duque de Sussex, ha llegado por sorpresa a Londres este lunes por la mañana para asistir en directo, en la sede del Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales, a la vista preliminar del caso contra la empresa Associated Newspapers, editora de los tabloides The Daily Mail y The Mail on Sunday, por presunta recopilación ilegal de información. Esta es una más de las muchas demandas que Enrique ha presentado contra diferentes medios de comunicación.
En el caso que empieza hoy en la capital británica, el editor ha sido demandado, también, por el cantante Elton John y su marido, David Furnish; por las actrices Elizabeth Hurley y Sadie Frost; por el exdiputado liberal-demócrata Simon Hughes, y por la baronesa Doreen Lawrence. Todos ellos acusan a la empresa editorial de actividades ilegales contra su privacidad. A mediodía, Elton John se ha unido al príncipe Enrique en el tribunal.
La del príncipe es la primera visita que hace en el Reino Unido desde la aparición de sus polémicas memorias y también desde la difusión del docudrama de Netflix en el que explica los detalles sobre el alejamiento de la familia real británica. Fuentes próximas al príncipe han indicado que con su presencia en el tribunal quería mostrar su apoyo al resto de demandantes.
En una declaración conjunta hecha público en octubre, el grupo de demandantes afirmó que habían tenido conocimiento con "pruebas convincentes, y muy angustiosas, de que habían sido víctimas de actividades delictivas abominables y graves violaciones de su intimidad". Por ejemplo, el uso de detectives privados para conseguir acceso a conversaciones privadas, después de que instalaran micrófonos en el interior de sus casas y coches.
También acusan a la editora de pagar a oficiales de policías corruptos, con vínculos con los detectives privados, para obtener información privilegiada, de suplantación de personalidad para conseguir registros médicos y de robo de información confidencial de bancos y entidades emisoras de tarjetas de crédito.
La editora del diario, sin embargo, niega las acusaciones. Las tacha de "calumnias absurdas" y de "intento premeditado y orquestado de arrastrar a algunas cabeceras, como la del DailyMail o el Mail on Sunday, al escándalo de la piratería telefónica", que afectó a los medios del grupo Murdoch a principios de la década de los 2010, y que acabó, entre otros, con el cierre de The News of the World.
Otras querellas
Con la vista preliminar de los cuatro próximos días, el juez Matthew Nicklin tendrá que determinar si el caso tiene suficientes razones jurídicas para salir adelante y acabar en un juicio.
Enrique y Meghan luchan actualmente en otro caso contra Associated Newspapers en relación con un artículo sobre su seguridad privada, aparecido en The Mail on Sunday. Los duques también han presentado una demanda contra el ministerio del Interior por estas mismas cuestiones de seguridad.
En mayo, además, las acusaciones de intervención de sus teléfonos serán objeto de un nuevo procedimiento penal, en esta ocasión contra la editora del Daily Mirror por presuntas escuchas ilegales entre el 1996 y el 2011. Finalmente, Enrique también ha demandado a la compañía News Group Newspapers, editora de The Times, The Sunday Times y The Sun, en relación con otras escuchas igualmente ilegales.
Si bien el rey Carlos III está en Londres, después de que se haya suspendido la visita de estado que tenía que empezar en Francia este domingo, no se prevé que se encuentre con su hijo. La prensa británica informa este lunes de que la excusa oficial es que Carlos III está muy atareado, entre otros asuntos preparando la visita de estado que el miércoles lo llevará a Alemania. Tampoco está previsto que Enrique vea a su hermano Guillermo ni la princesa de Gales, puesto que están fuera de la ciudad debido a las vacaciones de mitad de trimestre y la Pascua.