Violencia machista

Sandra Golpe revela que sufrió una agresión sexual: "Esta marca la tienes para siempre"

La presentadora de 'Antena 3 Noticias 1' dice que los hechos tuvieron lugar cuando llegaba a su casa por la noche

BarcelonaLa presentadora Sandra Golpe ha abandonado su habitual discreción para hacer público que fue víctima de una agresión sexual. "Me agredieron sexualmente a la salida del trabajo por la noche y esta marca la tienes para siempre. De las penas se aprende más que de las victorias. Pero eso me hizo mucho más fuerte", ha confesado la periodista en una entrevista a Diez Minutos.

La presentadora, que desde el 2017 dirige y presenta el informativo del mediodía en Antena 3, explica que los hechos se produjeron cuando trabajaba en otro medio de comunicación. "Yo llegaba a mi casa, hacía un turno de noche, no en Antena 3, cogí el metro y había un violador en serie merodeando por ahí. Cuando entré en mi portal, este señor se coló. Me agarró, me amenazó con un cuchillo, me tiró al suelo, me metió en el ascensor, me ató... y fue horrible", rememora a la revista del corazón. A pesar de explicar que todavía recuerda traumáticamente aquellos hechos, dice que gracias a su familia ha podido salir adelante. "Sin duda, mi familia es lo que me sostiene, y yo soy muy familiar, es lo más bonito en la vida. A mí me tocó la lotería cuando nací por tener la familia que tengo y luego mi alrededor es muy bonito", asegura.

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Golpe, nacida en Cádiz hace 48 años, asegura que le gusta pasar desapercibida, cosa que la ha llevado a no conceder entrevistas sobre su vida personal. "Es que siempre me he visto a mí misma como una periodista de base, nunca quise ser famosa. Me gusta más pensar en el prestigio que en la fama". Asegura que a su hijo tampoco le gusta nada el famoseo. "Para proteger a mi entorno, tampoco hablo de ellos", asegura la periodista, que lamenta que la exigencia de su puesto de trabajo le ha hecho perderse momentos de la crianza de su hijo. "Sí que me ha reprochado a veces que no he estado presente, pero no podía; soy una mujer trabajadora y teníamos que llegar a final de mes. David lo comprenderá cuando sea mayor y tenga responsabilidades. Pero siempre te queda esta culpa. Tampoco yo he estado tan ausente, siempre había alguien, lo que pasa es que los horarios han sido por la noche. Ahora llevamos cinco años un poco mejores", celebra.