Las consecuencias económicas de la paz
Me apropio indebidamente del célebre título del libro de Keynes del año 1919, advirtiendo sobre cómo las imposiciones a Alemania después de la Primera Guerra Mundial serían de imposible cumplimiento y derivarían en una futura crisis en Europa, para darles mi punto de vista sobre el planteamiento de paz que Trump quería proponer a Zelenski para detener la guerra en Ucrania.
La propuesta es simple. Primero Trump cerró un acuerdo con Putin, que no ha trascendido pero podemos imaginar. Ha citado al líder ucraniano cuando primero se puso de acuerdo con el ruso. No hace falta ser muy listo para adivinarlo. La propuesta a Ucrania es: "Te paro a Putin a cambio del 50% de los beneficios de las explotaciones energéticas de tu país".
Esa paz tiene un precio, y no es precisamente esa mitad de beneficios. El precio es Europa. La Unión Europea. Quien queda fuera de este acuerdo somos nosotros, los europeos.
¿Por qué Zelenski se negó? Pues porque se queda sin los apoyos que a largo plazo necesita Ucrania para sobrevivir. La garantía estadounidense era: "Si tengo intereses económicos en tu país, Rusia no te atacará". Pero eso ya nadie se lo cree. Macron acudió hace unas semanas a Washington a contárselo en persona: Putin se ha saltado reiteradamente los acuerdos de no agresión o alto el fuego.
Trump, otrora propietario de casinos, está jugando con dos juegos de cartas a la vez. Por un lado, estoy convencido de que ha propuesto a Putin recuperar la actividad de importaciones y exportaciones que les convienen a ambos a cambio de que deje a Ucrania en paz. Por el otro, ha ofrecido a Ucrania parar a Putin a cambio de la mitad de sus recursos naturales.
Las consecuencias económicas de un acuerdo así son claras: la Unión Europea, que ha soportado la mitad del coste de sostener a Ucrania militarmente, queda totalmente fuera de este acuerdo y, por tanto, dejará de ser una aliada para Ucrania. La única salvación a largo plazo de los ucranianos, en un mundo global y de grandes bloques, es adscribirse a uno de ellos. La propuesta de Trump conduce al alto el fuego inmediato, pero deja a Ucrania sin su lugar en el mundo en el largo plazo.
Zelenski soportó una bronca sin precedentes en el Despacho Oval porque estaba defendiendo a Europa. Las consecuencias económicas de la paz habrían condenado a Ucrania a la desaparición futura.
Es momento de que Europa demuestre que está dispuesta a hacer frente a Rusia por sí sola.