Alarma en la negociación de la investidura: ERC acusa a la ministra de Hacienda de bloquear el acuerdo
Los republicanos advierten que también existen discrepancias con la amnistía y la autodeterminación y Jové se reúne con Bolaños
BarcelonaSi Pedro Sánchez se mostró este miércoles optimista con la posibilidad de cerrar pronto un acuerdo para ser investido, ERC avisa este jueves de que las cosas no van como tocaría. Fuentes republicanas son claras: "No se está adelantando en absoluto". Los republicanos hacen saltar la alarma a falta de un mes para que se agote el plazo antes de que se tengan que repetir las elecciones y, además, señalan a una responsable: la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, explican fuentes republicanas. Ella es la principal negociadora socialista en los temas económicos, que ERC ha marcado como prioritarios junto a la amnistía.
En este escenario, el negociador y dirigente de ERC Josep Maria Jové se ha reunido este jueves con el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, que está hoy en Catalunya, según confirmaron al ARA fuentes conocedoras del encuentro. El mensaje que le ha trasladado ha sido el mismo: no se avanza suficientemente ni a buen ritmo. Para los republicanos, todas las carpetas deben abordarse porque la amnistía es necesaria, pero no suficiente. Jové ha informado del contenido del encuentro al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en una reunión en el Parlament aprovechando el pleno.
Según ERC, Montero y Hacienda no están cumpliendo con Catalunya las inversiones ya pactadas en los presupuestos generales del Estado, como el pago de deudas pendientes con los Mossos d'Esquadra y con el Hub Audiovisual de Catalunya. Esto se añade, además, a la batalla por la financiación de la Generalitat. Los republicanos critican que no se les haya presentado propuesta concreta alguna –ellos reclaman una negociación bilateral– y tampoco se haya abordado la condonación de la deuda del FLA, que el PSOE se mostró dispuesto a explorar. Es "inaceptable", expresan los republicanos, muy molestos con que el gobierno español no se esté tomando en serio la negociación.
Desde el primer minuto todos los ojos han ido a parar a la negociación entre Junts y el PSOE, centrada en la amnistía y en la figura del mediador, y ERC ha ido alertando a menudo de que no pueden darse por cerrados sus siete votos. Especialmente, si no se atienden a demandas como el traspaso integral de Cercanías, el pago de las deudas y la fijación de las bases para resolver el déficit fiscal catalán. Por ahora, a pesar de ser el punto más avanzado, no está cerrada ni la amnistía: está en disputa el relato de si se hace para resolver un problema de convivencia (versión socialista) o si se hace para que el Estado acepte que con el referendo del 1-O no se cometió ningún delito.
Problemas con la amnistía
Aunque ERC lleva ya tiempo afirmando que da por descontada la amnistía, hay flecos pendientes en el preámbulo de la ley que debería exonerar a los independentistas encausados por el Proceso. El PSOE, afirman, insiste en hablar de "convivencia" y de "pasar página" después del 2017, mientras que los republicanos creen que lo que hay que subrayar es que hay un conflicto político que debe resolverse a través de la política y no de los tribunales.
También hay obstáculos en la negociación sobre el mecanismo llamado a suceder la mesa de diálogo, donde ERC querrá negociar sobre la resolución del conflicto político con un referendo pactado. Los republicanos aceptan que ese espacio debería añadir de algún modo Junts –hasta ahora excluida porque la mesa era de gobierno a gobierno–, aunque los de Carles Puigdemont tienen otros planes y negocian una mesa directamente entre ellos y el PSOE.
El arrecife de Cercanías
Cercanías también se mantiene como uno de los arrecifes principales. En su última propuesta, el gobierno español planteó transferir a la Generalitat sólo las líneas que pasan íntegramente por Cataluña (que son las Cercanías de Lleida, y alguna línea en Barcelona). ERC ya ha avisado de que no aceptará un "traspaso fake". Debe ser integral, con recursos e infraestructuras, y eso incluye también todas las vías, aunque después éstas sigan circulando por otras comunidades autónomas.
En este contexto, el presidente Pere Aragonès y Félix Bolaños se verán hoy en un encuentro de la patronal Cecot en Sant Cugat (Barcelona) Bolaños es uno de los principales negociadores, y ERC podría aprovechar la presencia de Aragonès para escenificar su descontento.