Aragonés pide al PSC que apoye la financiación singular por Catalunya al igual que "los socialistas vascos defienden el concierto"
El presidente de la Generalitat avisa desde Madrid de que la cuota de solidaridad con el resto de territorios debería ser "limitada en el tiempo"
MadridEl presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha defendido este miércoles por la mañana en Madrid la propuesta de financiación singular que presentó ayer la consellera de Economía, Natàlia Mas, con el objetivo de acabar con "el déficit fiscal crónico que sufre Cataluña". Este sistema, según el cual Cataluña recaudaría el 100% de los impuestos, incluiría una cuota de solidaridad con el resto de territorios del Estado que, según Aragonès, debería ser "limitada en el tiempo hasta que la situación de estos territorios mejore". El presidente se ha dirigido especialmente al PSC para que apoye su propuesta y les ha recordado que "los socialistas vascos y navarros apoyan el concierto en un caso y el convenio foral en el otro".
En este sentido, Aragonés ha insistido en que el sistema que propone no es nuevo en el Estado y ya hay territorios que lo disfrutan, como Euskadi y Navarra (blindados en la Constitución). "El PSC debería apoyar esta propuesta, pero lamentablemente cuando hay una colisión entre los intereses de los ciudadanos de Catalunya y el PSOE, normalmente el PSC nos decepciona", ha añadido. El candidato de ERC a la reelección ha insistido en que los detalles del nuevo sistema de financiación singular, como la cuota de solidaridad y la contraprestación por los servicios que el Estado presta a Catalunya, deben negociarse de forma bilateral: "Yo no quiero decir a Andalucía qué sistema de financiación debe tener, pero no admitiré que nos digan cuál debemos tener nosotros", ha advertido. Para el presidente catalán, un criterio básico del nuevo sistema debe ser que si Catalunya es la tercera a aportar, debe ser la tercera a recibir, "y no la número catorce como ahora", avisó.
Ante el no inicial del gobierno español en la propuesta, Aragonès ha recordado: "Nos dijeron que era imposible que se reconociera que había un conflicto político con Cataluña, o los indultos, o derogar la sedición, o ahora el amnistía. Y ahora son una realidad". El líder catalán conminó al PSOE a negociar porque consideró que una negociación multilateral con todas las comunidades autónomas está condenada al fracaso: "¿O es que alguien se cree que en el contexto de polarización política actual, con casi todas las comunidades gobernadas por el PP, ¿es posible un acuerdo? El acuerdo posible siempre es el mejor", incidió.
Contra Ayuso
Aragonés ha aprovechado su presencia en Madrid para marcar distancias con el modelo económico que defienden José María Aznar e Isabel Díaz Ayuso: "Es un modelo que apuesta por la economía especulativa y que nos lleva a repetir los mismos errores que provocaron la peor crisis económica desde la Guerra Civil", ha advertido. "Nosotros somos los de las empresas y los centros tecnológicos", dijo recordando que Catalunya crece por encima de la media española y de la UE. "La economía catalana va bien, incluso muy bien. ¿Se imaginan lo que podríamos hacer si pudiéramos contar con todos los recursos que generamos?", se preguntó de forma retórica.
Malestar en el PSOE
El acto se celebró en el Hotel Intercontinental de Madrid con presencia de la ministra de Educación y portavoz del gobierno español, Pilar Alegría; miembros del Govern como la consellera Natàlia Mas; la consejera de Territorio; el secretario general de UGT, Pepe Álvarez; el delegado de la Generalitat en Madrid, Joan Capdevila; y el grueso de los diputados y senadores de ERC. También existía una amplia representación del mundo económico madrileño en un acto presentado por el presidente de la agencia Europa Press, Asís Martín. Aragonés ha avisado de que el nuevo sistema permitiría a Catalunya ser una economía más competitiva y esto redundaría en beneficio también del resto de España y Europa, pero ha basado su reclamación en que la principal perjudicada por el déficit fiscal es la clase trabajadora catalana. "¿O es que los pobres catalanes tienen menos derechos que los de otros territorios?", se preguntó.
El actual sistema de financiación entró en vigor en el 2009 tras una dura negociación entre el gobierno Montilla y el ejecutivo de Zapatero con el compromiso que debía revisarse en el 2014. Desde hace una década, sin embargo , ningún gobierno español se ha atrevido a proponer un modelo alternativo. Pese al aumento de recursos que significó en su día, el actual sistema no ha reducido el déficit fiscal crónico que la Generalitat cifra en unos 22.000 millones, un 8% del PIB catalán.
El PSOE se ha apresurado a desacreditar la propuesta ya tacharla de "electoralista". Fuentes del PSOE consideran que Aragonès hace ahora la propuesta con el único objetivo de erosionar al PSC cara a las elecciones del 12-M. De cara a fuera, todos los miembros del gobierno español mantienen que la negociación del nuevo sistema de financiación debe ser multilateral e instan al PP a hacerles llegar su propuesta. El PSC, por su parte, todavía tiene pendiente presentar una propuesta propia después de haber encargado informes a un grupo de expertos.
Puigdemont e Isla
Preguntado por la convocatoria electoral y la posible candidatura de Carles Puigdemont, Aragonès se mostró satisfecho por el hecho de que el expresidente pueda presentarse. "Yo quiero que todo el mundo que quiera hacer política pueda hacerlo, pero los ciudadanos quieren hablar de futuro y de propuestas", ha subrayado. "Los otros dos grandes partidos, PSC y Junts, han venido a nuestras posiciones. Isla decía que no habría amnistía, y ahora la defensa. Y Junts estaba en contra de la negociación con Sánchez, y ahora saca pecho. Están en el camino que nosotros hemos abierto", ha concluido. Aragonés también ha descartado que ERC pueda hacer Illa president tras el 12-M: "Yo lo que quiero es que siga habiendo un gobierno republicano", ha recordado.
El presidente también ha advertido de que la negociación del nuevo sistema de financiación es un hito en un camino que tiene como objetivo la celebración de un referéndum de autodeterminación para Catalunya. "Si no se puede resolver un conflicto político votante, ¿cómo hacerlo?", se preguntó.