Feijóo deja solo a Mañueco en su toma de posesión

MadridEn el juego de equilibrios para no desautorizar a uno de sus presidentes autonómicos y a la vez desmarcarse de cualquier alianza con Vox, Alberto Núñez Feijóo ha decidido dejar solo este martes al ya presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, en su toma de posesión –tampoco estuvo en el debate de investidura de la semana pasada–. Ha querido evitar, así, la imagen sentado junto al líder de Vox, Santiago Abascal, y ha hecho que la fotografía fuera para su número dos, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra. Feijóo, eso sí, ha enviado su "apoyo total" a Mañueco desde la sede de los populares en Madrid, donde durante todo este martes se ha puesto en la agenda una batería de reuniones con agentes económicos y sociales: esta mañana han desfilado representantes de la patronal –la CEOE y Cepyme avalan la rebaja de impuestos que defiende el PP– y esta tarde lo harán los sindicatos, con quienes el nuevo líder popular se reúne para presentarles su propuesta económica para hacer frente a la crisis derivada de la guerra en Ucrania.

"Yo hoy estoy aquí. O hablo con los sindicatos y les presento la propuesta antes de que la evalúen también mis compañeros en el comité ejecutivo, que es el miércoles, o le voy a dar un abrazo a Alfonso", ha afirmado Feijóo antes de la reunión con Cepyme. El presidente popular ha decidido posponer este abrazo a Mañueco para más adelante. Feijóo prevé hacer una "visita institucional" al presidente castellanoleonés en los próximos días. De momento, ha certificado su apoyo a distancia en un tuit:

Para Abascal, sin embargo, este martes todos los focos se tenían que poner en Castilla y León y, a pesar de que no ha entrado a valorar explícitamente la ausencia de Feijóo, sí que ha soltado: "No había ningún lugar más importante donde estar". No estaba Feijóo, pero sí el expresidente español Mariano Rajoy, y también la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, los dos sentados juntos en la primera fila. La presidenta madrileña es de las que ha defendido sin tapujos el acuerdo de gobierno entre el PP y Vox en Castilla y León y este martes lo ha vuelto a hacer cuando lo ha calificado de "gran pacto". "Me congratulo de que esta será una comunidad socialismfree", ha dicho antes de empezar el acto en Valladolid.

Mañueco ha intentado restar importancia a la ausencia de Feijóo y ha agradecido al dirigente gallego el "apoyo" que siempre ha recibido, ha dicho, "desde hace años y especialmente desde que es presidente del partido". En su discurso, el presidente de Castilla y León también ha agradecido a Vox, tanto a Abascal como a Juan García Gallardo (el nuevo vicepresidente de la comunidad) haber llegado a un acuerdo para "compartir responsabilidades de gobierno para trabajar por Castilla y León". De hecho, Mañueco se ha permitido ironizar sobre este pacto: "Ahora que toda España observa Castilla y León, la pondremos de moda". A pesar de que gobierna con la extrema derecha, Mañueco ha asegurado que su gobierno ofrecerá "moderación, diálogo, tolerancia, integración y espíritu abierto y constructivo".

El gobierno español pide proteger el estado de las autonomías

La ministra de Educación, Pilar Alegría, ha asistido a la toma de posesión de Mañueco en representación del gobierno español. Alegría ha garantizado "lealtad institucional" al ejecutivo castellanoleonés, pero también ha pedido al presidente autonómico que proteja el estado de las autonomías y el proyecto europeo, dos cuestiones a las cuales Vox se opone. En la misma línea, la portavoz del gobierno español, Isabel Rodríguez, ha asegurado que el gobierno español "vigilará con atención" que la alianza con la extrema derecha "no haga retroceder en derechos y libertades" a los ciudadanos. La ministra portavoz, además, también ha acusado a Feijóo de intentar "tapar sus vergüenzas" no estando en Valladolid este martes: "Sabe que el pacto va en la dirección contraria a la derecha europea".