El independentismo mira a Suiza para negociar con el Estado
Varias organizaciones han asesorado a ERC y Junts, que se reunirá con el PSOE en el país helvético
BarcelonaEl PSOE pactó dos tablas de negociación paralelas con ERC y Junts, de las que aún no se sabe cómo funcionarán, cuál será su plan de trabajo y su calendario. Lo que es seguro es que el independentismo volverá a poner sobre la mesa un referendo que el PSOE rechaza y que en cada uno de esos espacios de negociación habrá mecanismos de verificación internacionales. La pista de que la implicación de organizaciones de carácter internacional será un hecho la ha dado este viernes el propio presidente español, Pedro Sánchez, cuando ha explicado que la primera reunión que el PSOE mantendrá con Junts será en Ginebra, una ciudad donde está entidades que ya han ejercido con anterioridad la función de mediación en conflictos. Incluso alguna vinculada al Proceso, como el HD Centre for Humanitarian Dialogue, con sede en Suiza, que varias fuentes consultadas por el ARA apuntan que ya asesoró a Junts y ERC en el 2018, cuando se buscaban relatores para el diálogo con el ejecutivo español. HD también participó, por ejemplo, en el desarme de ETA.
El país helvético es uno de los epicentros mundiales de la mediación en conflictos. Hay establecidas numerosas organizaciones especializadas en este ámbito, pero también el propio gobierno suizo se ha ofrecido a interceder en varios conflictos, algunos recientes como el de Ucrania. De hecho, el director del Instituto Catalán Internacional por la Paz (ICIP), Kristian Herbolzheimer, recuerda al ARA que Suiza, junto a Suecia y Noruega, es un país uno de cuyos ejes de la política exterior es 'apuesta por "la paz, el diálogo y la reconciliación". Ahora bien, subraya que la política que pueden ejercer estos gobiernos puede verse limitada por sus relaciones diplomáticas y remarca que cualquier actuación debe tener el visto bueno del país implicado. En el 2017, los medios suizos informaron de la predisposición del gobierno suizo a mediar entre Catalunya y España, pero el ministro helvético de Exteriores aseguró que no se daban las condiciones para hacerlo: España no tenía ninguna intención de aceptar una mediación internacional.
En Suiza también están establecidas varias organizaciones que, a diferencia del gobierno, tienen "más flexibilidad" a la hora de actuar. Es el caso del HD Centre for Humanitarian Dialogue o también de SwissPeace.
El grado de intervención del mediador
El tejido organizativo suizo intercedió en el caso de ETA. Ahora bien, ¿la implicación en este conflicto y la negociación que plantea el independentismo con el Estado pueden compararse? De entrada, la naturaleza de los conflictos es distinta, porque en el caso del País Vasco, pero también de Irlanda del Norte o Kosovo, estamos hablando de conflictos armados. Sin embargo, existe un denominador común en todos los casos: el grado de intervención de la figura que ejerza de mediador. Sus funciones serán definidas por ambas partes en cuestión. De hecho, en los acuerdos con el PSOE no se habla de mediador sino de verificador, que deberá determinarse si es una sola persona o un equipo, y si tendrá un papel más o menos propositivo. En el caso de Junts y ERC, en los dos documentos pactados con el PSOE se pone por escrito que la función de esta tercera figura será "acompañar, verificar y realizar seguimiento de todo el proceso de negociación y de los acuerdos" a los que ambas partes puedan llegar.
"Es un papel no proactivo", afirma el mediador y consultor internacional especializado en resolución pacífica de conflictos Jordi Palou en conversación con el ARA. El experto concreta que la función de este verificador también implicaría verificar si se alcanza un acuerdo provisional. Coincide Kristian Herbolzheimer. Ambos explican que durante el proceso de negociación la figura que ejerza de verificador puede desempeñar un papel de observador –simplemente escuchar las conversaciones– o también tomar nota de las reuniones, una función más notarial. "Aunque observe, el hecho de que sea da tranquilidad a las partes", defiende Herbolzheimer.
Tablas entrelazadas?
Hay más incógnitas aún por resolver, como el hecho de si se entrelazarán las tres tablas de diálogo que, por ahora, todavía deben constituirse. En este sentido, Palou detalla una fórmula para unir los acuerdos a los que puedan llegar Junts y ERC en sus respectivos espacios de negociación con el PSOE: apuesta por tener que someterse a consideración de la mesa de ambos gobiernos. El experto recuerda que una vez todas las partes hayan validado los acuerdos, entonces deben "socializarse" entre las personas que representan a cada parte. En el caso de los partidos, primero deberían comunicarlo a la militancia, y en el caso de los gobiernos, trasladarlo a la ciudadanía.
Ahora mismo, no hay ningún plan para coordinar las tres mesas de diálogo planificadas. De hecho, habrá que ver primero si ambos partidos independentistas quieren hacerlo, porque, a priori, cada uno quiere sacar adelante su propia negociación. Juntos puso por escrito en su acuerdo con el PSOE que la primera reunión iba a ser este mes de noviembre, mientras ERC no fijó ninguna fecha y desde el partido defienden que el primer encuentro lo harán público cuando haya alguna concreción. La mesa de diálogo entre gobiernos fue uno de los motivos de la quebradiza entre los dos partidos en la Generalitat, y los de Carles Puigdemont han rechazado esta semana la oferta del presidente, Pere Aragonès, de incorporarse a la mesa entre ejecutivos .