Jordi Hereu, el hombre que cambió Barcelona pero naufragó como alcalde

MadridAunque casi nadie lo recuerda, Jordi Hereu (Barcelona, 1964) es responsable de la implantación de dos decisiones que cambiaron de forma radical la movilidad en la ciudad de Barcelona, el área verde y azul y, después, el Bicing, como concejal. Sin embargo, Hereu naufragó como alcalde, en parte por el desgaste de la marca del PSC después de más de dos décadas de gobiernos socialistas en la ciudad y también por errores propios. Ahora será el segundo alcalde de Barcelona que ocupa la cartera de Industria (después de Joan Clos, en el 2006), y el tercero que ocupa un puesto en el consejo de ministros después de Narcís Serra, en 1982.

¿Pero quién es Jordi Hereu? Hereu es un perfil de tecnócrata clásico del PSC, formado en Esade y fogueado en la maquinaria del Ayuntamiento, donde entró como gerente del distrito de Les Corts en 1997. Su perfil ya no era el de político clásico, sino que era de gestión. No en vano, su formación es económica, como licenciado en dirección y administración de empresas y MBA por Esade, y el primer lugar donde entra a trabajar es en el Port de Barcelona. Dentro del Ayuntamiento rápidamente se convierte en alguien que sobresale a la hora de tomar decisiones difíciles y contraculturales, como la de acabar con el aparcamiento gratuito en la ciudad. Hoy nos parece increíble pensar que hubo un tiempo en el que esto era posible –a pesar de consumir horas y horas en la vida de los barceloneses y los que visitaban la ciudad.

El fracaso del tranvía

De carácter afable y con la fama justamente ganada de gestor eficiente, Hereu llega a la alcaldía en el 2006 porque el PSC detecta el desgaste de Joan Clos y desde Nicaragua (la antigua sede de los socialistas catalanes) se decide cambiarlo antes de las elecciones. Hereu retiene la alcaldía en las elecciones del 2007 pero la marca PSC ya empieza a notar también el peso de tantos años en el gobierno municipal, desde 1979. El alcalde se encuentra con que no tiene ningún proyecto emblemático ni es una persona especialmente carismática, pero su tumba política será el proyecto del tranvía por la Diagonal. Un referéndum forzado por ERC acabará en un desastre de organización y también de resultado, con una abrumadora victoria del no (80% de los votos). Hereu, que se convierte en blanco de humoristas e imitadores (por su timbre de voz agudo y los cambios de volumen), ya no podrá recuperarse y perderá frente a Xavier Trias en el 2011.

Antes todavía tendrá tiempo de derrotar a Montserrat Tura en unas primarias que suponen el primer desafío del sector catalanista del partido al aparato. Su final en la alcaldía es especialmente amargo porque a él le toca ser el último de una estirpe con nombres como Narcís Serra o Pasqual Maragall. Para el PSC la pérdida del Ayuntamiento de Barcelona es un trauma del que no se recuperará hasta hace solo unos meses, gracias a la operación de Jaume Collboni por sumar los votos de los comuns y el PP, 12 años en total.

El exalcalde pasa entonces al sector privado y prueba suerte en empresas y plataformas centradas en el desarrollo de la marca Barcelona y la atracción de empresas tecnológicas. Pero cuando llega el 2020 es uno de los catalanes a los que acude Pedro Sánchez para ocupar cargos en el sector público y lo nombra presidente de Hispasat, el operador español de satélites. Sin embargo nunca se ha desvinculado de Barcelona y en Madrid se lo ha podido ver siempre en actos con presencia de miembros del PSC, especialmente cuando Jaume Collboni ha ido a protagonizar alguno.