Jordi Pujol que quiere dirigir la CUP
Un exconcejal con el mismo nombre que el expresidente y fundador de CDC integra la candidatura unitaria del secretariado
BarcelonaSólo se ha presentado una candidatura colectiva para dirigir al nuevo secretariado de la CUP. Entre los dieciséis integrantes de la nueva dirección se encuentra un nombre que destaca sobre el resto. Se trata de Jordi Pujol. Y no, no es el expresidente; la restitución de Pujol aún no ha llegado a las filas cuperas. Es el exconcejal de San Sadurní de Anoia, nacido en 1985, y que comparte nombre y apellido con el expresidente.
Sus padres no eligieron este nombre en homenaje a Pujol: "Mi madre dice que no me lo puso por el presidente porque asegura que no votaba a Convergència, sino porque era un nombre que se ponía bastante y que le gustaba" . De hecho, su madre confiesa que tampoco se esperaba que Jordi Pujol estuviera veinte años en el poder: "Siempre me dice riendo que se alargó más de lo que pensaban", explica Pujol cupero en conversación con el AHORA, que también dice que las bromas por su nombre le han acompañado toda su vida, desde que era pequeño hasta ahora. "Siempre me han hecho cachondeo, me llaman "presidente" o "muy honorable", pero lo llevo bien", ironiza.
Si el expresidente fundó CDC, su homólogo es uno de los impulsores de la CUP de San Sadurní, que con él como concejal en la oposición, acabó con la "machista" coronación de la Reina del Cava, que llevaba 34 años celebrandose. La pasión por la política es su única similitud con el expresidente. En la declaración de bienes patrimoniales que hizo en el 2019, en el último de sus dos mandatos, expuso que no tenía ningún inmueble y que sólo tenía dos furgonetas: una Opel Vivaro camperizada del 2007 y una Citroën Berlingo del 2017. "Sigo sin tener ningún piso y ya solo me queda Berlingo; he perdido patrimonio", dice riendo.
Sus orígenes tampoco deben buscarse en la burguesía catalana. Lizana del segundo apellido proviene de la familia andaluza de su madre. "Vengo de una familia normal y corriente. No soy hijo de ningún propietario de cavas; porque, si lo fuera, quizás no sería de la CUP", comenta, socarrón. De abuelo sólo le queda uno, pero no confía en que le deje ninguna herencia que le permita ampliar la cartera de vehículos: "De momento no me han dejado ninguna deja, ni tengo dinero en Andorra, ni ningún abuelo que se diga Florenci; ya me pueden investigar". A punto de cumplir los cuarenta y sin hijos, tampoco apunta que llegue a los siete descendientes de su homólogo.