Lesmes frena nombramientos visto el inminente acuerdo por el CGPJ
El PSOE y el PP comienzan con RTVE el desbloqueo de órganos constitucionales
MadridTodo apuntaba a que el desbloqueo de los órganos constitucionales sería en cascada y que el primer acuerdo acabaría siendo para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Pero el PSOE y el PP han sorprendido con un primer pacto por RTVE –con consejeros designados por Unidas Podemos y el PNV–, mientras que las negociaciones para acabar con el mandato en funciones desde hace más de dos años de Carlos Lesmes y todo el órgano de gobierno de los jueces han entrado en un terreno pantanoso que podría desencallarse en cualquier momento o bien alargarse ya hasta la semana que viene. En medio de este contexto, el CGPJ actual ha decidido este jueves dar una semana más de margen a los equipos negociadores aplazando al próximo jueves los nombramientos previstos de ocho altos cargos judiciales.
Esta decisión, sumada al hecho de que el lunes finalmente no declarará el extesorero del PP en el juicio por los papeles de Bárcenas en la Audiencia Nacional –se ha aplazado una semana más por problemas de aforo de la sala–, han quitado presión tanto al PP cómo al PSOE. El pleno del CGPJ ha vivido un debate intenso sobre por qué tenía que sacar adelante algunos nombramientos como los de la jurisdicción militar pero, en cambio, frenar los tres del Tribunal Supremo y cinco más de tribunales superiores de justicia y audiencias provinciales. Al final ha optado por una decisión salomónica: convocar un pleno extraordinario para el próximo jueves en el que se aborden los nombramientos, salvo que antes haya acuerdo para renovar el CGPJ y sea el equipo siguiente el que se encargue.
No es la primera vez que Lesmes para toda acción al ver la inminencia de un posible acuerdo. A pesar de que durante los últimos dos años no ha parado de hacer designaciones que han enervado al PSOE, tanto en enero como julio del 2020 ya paralizó nombramientos. El pasado lunes, sin embargo, se encontró con un grupo de vocales, con conservadores y progresistas, que se opusieron a la decisión y forzaron la inclusión de las designaciones en la orden del día de este jueves. Pero al final una mayoría ha decidido dejar la decisión para más adelante mientras el PSOE y el PP se han comprometido a avanzar en el desbloqueo de los órganos constitucionales –además del CGPJ queda pendiente el Tribunal Constitucional, en el que Lesmes está en las quinielas para ser designado magistrado por parte de los populares– en los “próximos días”.
El miércoles por la noche parecía que el acuerdo por el CGPJ tenía que ser inminente. Fuentes populares recomendaban esperar hasta entrada la noche, pero este jueves ya enfriaban la situación. El equipo de Casado continúa parapetado en el veto a los candidatos que va proponiendo Podemos, después de haber descartado al juez de la Audiencia Nacional José Ricardo de Prada –uno de los responsables de la sentencia de la Gürtel y que consideró acreditada la caja B del PP– y la juez en excedencia y actual delegada del gobierno español contra la violencia de género, Victoria Rosell.
Las dudas sobre la presidencia
Pero el acuerdo por el nuevo consejo de administración de RTVE marca el camino del equilibrio de fuerzas en las próximas renovaciones. Fuentes del PP evitaron señalar ayer que el acuerdo fuera también con Podemos y el PNV, pero el caso es que se han designado consejeros de los dos partidos. Desde las negociaciones del agosto pasado el PSOE también remarca que habrá representación de su socio de coalición en el reparto. Los populares estarían moviendo cielo y tierra para intentar justificar un acuerdo con Podemos que no parezca que es con Podemos. Sobre la mesa estaría la elección de José María Fernández Seijo, que decretó nulas las cláusulas suelo, e Ignacio Espinosa, del TSJ riojano.
Por otro lado, la negociación seguiría encallada en quién tiene que presidir el órgano de gobierno de los jueces. Hay consenso esta vez en que sea una mujer, pero tanto el PP como el PSOE se han comprometido a reservar el nombre hasta el final para que no pase lo mismo que con el acuerdo para que Manuel Marchena fuera el magistrado del Tribunal Supremo. Una de las opciones sería dar tres nombres a cada vocal para que, sin la decisión directa de los partidos, eligieran quién tiene que ser la nueva presidenta del órgano de gobierno de los jueces.