Meritxell Batet renuncia al acta de diputada en el Congreso y deja la primera línea de la política
La expresidenta de la Cámara Baja ya renunció a volver a ser la tercera autoridad del Estado
MadridMeritxell Batet, líder del PSC por Barcelona en el Congreso, ha presentado este miércoles su renuncia como diputada, según ha podido saber el ARA. En el escrito en el que hace constar su dimisión, se limita a manifestar su "agradecimiento a los servicios de la cámara por los cuidados recibidos". "Han sido 19 años intensos como diputada del Congreso, ministra del gobierno de España y presidenta del Congreso. Me voy con el orgullo de haber servido a un proyecto colectivo que busca, por encima de todo, mejorar la vida de las personas y transformar la sociedad. Un proyecto al que me he dedicado en cuerpo y alma y al que seguiré sirviendo vaya donde vaya", ha explicado en un tuit. Según fuentes del PSC, mantendrá los cargos orgánicos –es vicesecretaria primera del partido– y el escaño será ahora para Ignasi Coma Conesa.
Tras ser elegida el 23-J y haber liderado una candidatura que logró 13 diputados para el PSC en la circunscripción de Barcelona, pocos días después anunció que no quería repetir como presidenta de la cámara baja, un cargo que había ostentado en las dos anteriores legislaturas. Primero, en el corto mandato parlamentario surgido de las elecciones del 28 de abril de 2019, que desembocó en la repetición electoral del 10 de noviembre del mismo año. Después, en esta última legislatura, marcada por un tono dialéctico que ha situado su gestión de los debates parlamentarios bajo la lupa.
Batet ha querido dar las gracias especialmente al primer secretario del PSC, Salvador Illa, y al líder del PSOE, Pedro Sánchez. La ya exdiputada catalana llegó a hacer ticket electoral con el ahora presidente en funciones en las elecciones generales de 2015 como número 2 en la lista por Madrid. En la repetición electoral de junio de 2016, tras el paso al lado de Carme Chacón, tomó las riendas de la candidatura por Barcelona. En ese momento, lejos de ser primera fuerza en Catalunya como lo fue el 23-J, el PSC quedó por detrás de En Comú Podem, Esquerra y Convergència. Antes ya había formado parte de las listas de los socialistas catalanes en Madrid, desde 2004, entonces bajo el liderazgo de José Montilla, aunque no se afilió hasta 2008. Batet vivió las tensiones y discrepancias internas sobre Catalunya: el año 2013 votó favorablemente en el Congreso a algunas iniciativas sobre el derecho a decidir junto con el resto de diputados del PSC, diferenciándose así del PSOE. También lo hizo Francesc Vallès, ahora hombre fuerte de Sánchez como secretario de estado de Comunicación de la Moncloa.
Más allá del ámbito parlamentario, a raíz de la moción de censura a Mariano Rajoy en 2018, Batet fue nombrada ministra de Política Territorial en el gobierno en solitario de Pedro Sánchez y empezó la reanudación de relaciones con la Generalitat con la puesta en marcha de la Comisión Bilateral. En esas fechas prometió una reforma constitucional que no llegó y ya puso voz a la negativa del PSOE a acordar un referéndum de autodeterminación para Catalunya, ahora de nuevo sobre la mesa de las negociaciones de la investidura de Sánchez por exigencia de los partidos independentistas.
A nivel orgánico, fiel a Sánchez, formó parte de la ejecutiva de Ferraz en su primera etapa como secretario general, antes de que la guerra interna acabara con una victoria provisional de la andaluza Susana Díaz. Jurista y profesora de derecho administrativo y constitucional, Batet se ha ocupado de las áreas relativas a la arquitectura del Estado. En la ejecutiva del PSOE se encargó de la carpeta de estudios y programas y ahora, en la dirección del PSC, pilota el área de mejora del autogobierno.