Financiación autonómica

El gobierno español niega un concierto económico para Catalunya y ERC amenaza con derribarlo

María Jesús Montero y los republicanos chocan por la terminología del acuerdo sobre la financiación singular

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La vicepresidenta primera del gobierno español, María Jesús Montero, en Rota (Cádiz)

Madrid"Ni es un concierto económico ni es una reforma del modelo de financiación". Con esta contundencia se ha expresado este miércoles la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en relación con el acuerdo entre el PSC y ERC para la financiación singular en Catalunya. Y los republicanos, que intentaron presentar el pacto para investir a Salvador Illa como un sistema similar al de Euskadi, han querido enviar un aviso al gobierno español. "Si no quiere decir concierto económico puede decirle de otra manera, pero los acuerdos que se han firmado deben cumplirse. Si no, el PSOE tendrá que buscar mayorías alternativas para los presupuestos generales del Estado, o bien convocar elecciones", ha amenazado a la portavoz de ERC, Raquel Sans. Lejos de poner en duda el cumplimiento del acuerdo, Montero le ha defendido ante las críticas internas del PSOE y también del PP. Por su parte, la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, ha denunciado que "durante dos semanas se ha vendido un concierto económico inexistente" y lamentó que en el Parlament se haya construido una mayoría "a partir de un engaño ". "ERC ha mentido y los socialistas se han callado", se quejó. En cualquier caso, este jueves fuentes de la Moncloa han informado a la agencia ANC de que el gobierno español "cumplirá" el pacto con ERC sobre la financiación.

Era la primera vez que el gobierno español entraba en la terminología de lo pactado para la investidura de Salvador Illa, aunque la nueva portavoz del gobierno de la Generalitat, Silvia Paneque, ya evitó hablar de "concierto" en su primera rueda de prensa en el cargo. La palabra concierto no aparece en el documento de 25 páginas del acuerdo entre ERC y el PSC y varios expertos consultados por el ARA cuando se conoció el acuerdo coincidían en que está lejos del modelo vasco. En declaraciones desde Rota (Cádiz), la vicepresidenta primera española ha dejado claro que el único concierto que existe es el de Euskadi y Navarra. Con palabras similares a las de ERC, Montero también ha apuntado que "cada uno nombra y designa a los acuerdos como cree conveniente". "Pero ni es un concierto económico, puesto que la única experiencia en nuestro país es el vasco y navarro, ni es una reforma del modelo de financiación", ha insistido.

En el caso de Euskadi y Navarra, estas comunidades recaudan los impuestos y después pactan bilateralmente una aportación por los servicios que el Estado presta en estos territorios [el llamado cupo]. La diferencia con Catalunya sería que una Hacienda catalana también recaudaría los tributos, pero el Estado se llevaría un porcentaje que todavía no se ha fijado. Además, Catalunya abonaría una cuota de solidaridad con el resto de comunidades –aún se debe negociar cuál será– siguiendo el principio de ordinalidad (la que más aporta más recibe, y así sucesivamente), lo que implicaría mantenerse en el régimen común de financiación, al que no pertenecen ni Euskadi ni Navarra. Para regular este nuevo encaje habría que reformar la ley orgánica de financiación de las comunidades autónomas (Lofca) y es ahí donde ERC defenderá salir del régimen común. En cambio, la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado ha reiterado este miércoles que lo pactado sí implicaría que Catalunya saliera del régimen común y su portavoz, José María Peláez, ha expresado en Canal Sur Radio que su colectivo está "radicalmente en contra" porque es "inconstitucional".

Autogobierno y solidaridad

"Si estudian cómo la financiación de las competencias autonómicas ha ido evolucionando, ha estado siempre atravesada por mayor capacidad de autogobierno y también presidido por la solidaridad, entendida como la aportación de todos los territorios para asegurar la homologación de los servicios públicos de los españoles, vivan donde vivan. Quien diga otra cosa miente. Quien acuse al gobierno español de atentar contra estos principios miente", ha subrayado Montero, quien ha asegurado que la financiación singular para Catalunya "no supone ningún agravio" para el resto de autonomías: ha puesto de ejemplo que ya hay para Canarias y Baleares y ha apostado por una "mayor federalización del Estado". Sin embargo, Montero no ha resuelto los interrogantes que todavía quedan abiertos del acuerdo con ERC.

El presidente español, Pedro Sánchez, ya se refirió antes de irse de vacaciones a esa voluntad de profundizar en la cuestión federal, y ha incidido Montero. La vicepresidenta primera reconoció que el acuerdo entre ERC y el PSC da respuesta a la vocación de más autogobierno que reclaman Catalunya "y otras partes de España", y dejó claro que todo lo que impulse el gobierno español en este sentido " será bueno para el conjunto de España”. En este sentido, ha destacado que el pacto aporta una "nueva mirada que puede tener interés para el conjunto del territorio". Montero ha instado al PP a plantear una propuesta para reformar el modelo -Alberto Núñez Feijóo reunirá a los líderes territoriales el 6 de septiembre-, pero ha augurado que no se conseguirán poner de acuerdo los intereses de todas las comunidades.

El PP, sin alternativa

"Invito a las comunidades autónomas a que se sumen al acuerdo para poder explorar otras rutas que permitan satisfacer las demandas de autogobierno sin que esto implique romper la solidaridad", ha insistido la ministra, muy crítica con el PP por no tener una propuesta " alternativa" y hacer de la "confrontación con Catalunya" su eje político. La crítica de Montero a la formación conservadora es que no tiene un planteamiento único para reformar el modelo de financiación porque los intereses de cada territorio son distintos. "Las comunidades se sitúan en un punto de máximos y entienden que si ceden tendrían problemas electorales. Es imposible encontrar un punto de acuerdo si no se cede", constató. Por eso, se mostró convencida de que el PP será incapaz de presentar una propuesta concreta. "Que sea una ley orgánica, no unos principios inspiradores. Que presente la formulación matemática, pero les anuncio que no lo hará", aseveró.

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