El PP entra en modo Aznar con riesgo de pasarse de frenada
MadridCon la finezza que le caracteriza, el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, admitía el jueves en el programa de Federico Jiménez Losantos: “Como diría el expresidente José María Aznar, «lo que pueda hacer algo, que lo haga», y lo estamos haciendo . Nuestra obligación es echar a Pedro Sánchez del gobierno lo antes posible, y lo haremos con todos los medios a nuestro alcance. Si son judiciales también lo haremos”.
No es la única guía con copyright de Aznar que sigue al PP de Alberto Núñez Feijóo. Hace 30 años, el entonces líder de la oposición en Felipe González practicaba una estrategia de desgaste que acabó dando sus frutos en las elecciones de 1996.Váyase, señor González”, le dijo al debate de política general en el Congreso en abril de 1994. “¿Cuál será el próximo escándalo?”, le preguntó un mes después, en una comparecencia por la huida del ex director de la Guardia Civil Luis Roldán . Ahora Feijóo hace esta misma pregunta a Sánchez, y el miércoles en la sesión de control repetía: “Marche ya”. Pueden trazarse aún más paralelismos con la situación actual: el gurú de Aznar en la dirección de comunicación del PP era Miguel Ángel Rodríguez, el ahora jefe de gabinete de Isabel Díaz Ayuso. A diferencia de lo que sucedía con Pablo Casado, tiene buena relación con Feijóo e incluso comparten estrategias.
González se desangraba por el caso de financiación ilegal Filesa y otros episodios de corrupción que habían provocado dimisiones de ministros y acusaciones al fiscal general de “actuar a la carta” por, supuestamente, intentarlos encubrir. En Génova creen que emular ese escenario es la vía para derribar a Sánchez, aunque el contexto no es exactamente el mismo. Esto tiene un riesgo, el de pasarse de frenado. Están abiertos el caso Ábalos y el caso Begoña, pero la Fiscalía Anticorrupción plantea archivar la querella que el PP presentó contra el PSOE por presunta financiación ilegal. A raíz de ello, un exportavoz del PSOE explica que mientras ejercía el cargo debía presentar el DNI siempre que entraba en Ferraz y calificaba de "chiste" el testigo de un anónimo que asegura que entró con 90.000 euros en bolsas en la sede socialista. Ahora bien, el PP amenaza con tener más información. ¿Y pruebas?
Repliegue de los socios
La ofensiva judicial se explica también porque en Génova cuentan que Sánchez puede salvar la papeleta de los presupuestos. Y es que la reacción a la polémica imputación de Álvaro García Ortiz por parte de Manuel Marchena ha sido un repliegue de los socios. “El mensaje está claro: aquí mando yo y el estado es mío”, tumbaba el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, sobre la estrategia del PP de la mano de la derecha judicial. Ciertamente, se mantiene la incógnita de Junts, que negocia discretamente con la Moncloa. A diferencia de Aznar, que tenía la mayoría absoluta al alcance, proyecto y equipo, Feijóo por ahora sólo tiene Vox y 137 diputados que no se dieron cuenta de que votaban a favor de reducir las penas de los presos de ETA. ¿Bastará con los jueces?
Los detalles de la semana
La persona del grupo del PSOE en el Congreso que se encarga de atar los apoyos para ganar votaciones aseguraba el miércoles que no había contactado con José Luis Ábalos, ausente del pleno y centrado en su defensa judicial. No era imprescindible tener su voto, y el PSOE ha sufrido otras dos derrotas parlamentarias. Con siete días de margen, su móvil echaba humo. “Ya estoy buscando votos para la próxima semana”, decía.
En el acto del grupo Prisa del lunes en Barcelona, el consejero de Presidencia, Albert Dalmau, llevaba una corbata verde. Entre el público, piezas verdes. Después de que Pedro Sánchez apareciera con una corbata verde, corrió la sospecha de que se esperaba la presencia de Felipe VI, que el día anterior estaba en Barcelona. ¿Por qué? Por la reivindicación monárquica de relacionar VERDE con Viva el Rey de España. Por último, resultó ser una casualidad.