Congreso

Presión a los diputados de Podemos para que devuelvan el acta después de la rotura con Sumar

Belarra llamó a Bolaños para decirle que no debe sufrir por la legislatura

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La secretaría general de Podemos, Ione Belarra, este sábado.

Barcelona / MadridLa ruptura de Podemos con Sumar en el Congreso supone un incumplimiento del acuerdo de ambas formaciones para presentarse juntas en las elecciones generales bajo la marca que lidera la vicepresidenta del gobierno español, Yolanda Díaz. Esto es lo que defienden varias fuentes del espacio de Sumar, que extienden ahora sobre los cinco diputados de Podemos la sombra de la acusación de transfuguismo. Se incrementa así la presión porque Ione Belarra, Lilith Verstrynge, Javier Sánchez Serna, Martina Velarde y Noemí Santana, ahora al grupo mixto, devuelvan el acta que obtuvieron formando parte de la candidatura de Sumar.

Los primeros en pedirlo de manera pública han sido los comunes. La ejecutiva de Catalunya en Comú ha lanzado un primero un aviso en una carta enviada este miércoles a su militancia: "Cuando alguien abandona un proyecto o rompe los acuerdos firmados, la respuesta coherente es devolver el acta de diputado o diputada, por para respetar la decisión de las urnas". La dirección recuerda la "generosidad" con la que se hicieron las listas para las generales, un eufemismo para decir que dirigentes de Podemos consiguieron figurar en lugares estratégicos para asegurarse, en lo posible, un escaño. En Cataluña, donde se esperaban buenos resultados, esto supuso incluir a la madrileña Lilith Verstrynge en la lista por Barcelona como número 4, pese a su falta de vínculos con el territorio. Los comunes tuvieron que tragarse las críticas por haber bendecido a una candidata paracaidista.

La baja de Jéssica Albiach de Podemos, conocida este martes y hecha la semana pasada, rompe los nexos que había entre el núcleo duro de Catalunya en Comú y el partido lila en Catalunya. Su renuncia se añade a la de Jesús Santos, coordinador general en Madrid, que se cerró ayer por sus diferencias con la cúpula y la gestión de las relaciones con Sumar. A estas bajas se refirió este miércoles el exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, quien achacó a la ambición política la decisión de cuadros del partido de marcharse hacia Sumar ahora que los lilas pasan "momentos difíciles". "Hay un tipo de profesionales de la política que tienen esa habilidad de tratar de agarrarse al barco que consideran más fuerte", ha dicho. Sin embargo, matizó que el de Albiach y Santos son dos casos diferentes.

Aunque voces de peso dentro de Sumar consideran que los diputados de Podemos deberían devolver el acta, no se espera que pongan en marcha una campaña pública dura para conseguirlo. En primer lugar, porque siguen apostando por la unidad de la izquierda, y, en segundo, porque no quieren quemar puentes frente a un posible entendimiento para las europeas, aunque es una posibilidad que queda cada vez más lejos. La incógnita se extiende a las autonómicas gallegas y vascas. De momento, Podemos Euskadi defendió este miércoles el diálogo con Sumar, aunque dejó claro que la decisión final quedará en manos de la militancia.

¿Debe sufrir Pedro Sánchez?

Pero ¿la rotura entre Sumar y Podemos tendrá consecuencias para los planes del gobierno de coalición de Pedro Sánchez? Podemos querrá marcar perfil político y, según ha asegurado su portavoz, Pablo Fernández, en Catalunya Ràdio este miércoles, el PSOE tendrá que negociar con ellos las iniciativas que quiera aprobar, empezando por los presupuestos.

De puertas adentro, sin embargo, el panorama es más tranquilizador para Sánchez, que ha visto cómo Podemos se añade a la larga lista de partidos que apoyaron su investidura y con quien tendrá que pactar las leyes. Ayer, Sánchez llamó a Díaz para abordar esta cuestión. Lo mismo hizo Belarra con el ministro de la Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, a quien trasladó que no debe sufrir por la legislatura. Y es que la decisión de irse al grupo mixto, según fuentes de Podemos, obedece a la voluntad de preservar su autonomía, recuperar voz y poder marcar el paso político, pero no a ningún deseo de hacer saltar por los aires al gobierno de coalición. Parece que Sánchez salva una vez más los muebles.

Díaz pide "altura de miras"

Con la vista puesta en las posibles futuras dificultades de negociar con Podemos, la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, no quiso entrar en el cuerpo a cuerpo y pidió a los cinco diputados no poner "en peligro" las políticas del gobierno de coalición. También les instó a "no confundirse de adversario" y lamentó la "desafección política" que puede generar la rotura.

Díaz, que pidió "altura de miras", optó por un tono más moderado que el empleado ayer por la portavoz Marta Lois, que acusó a Podemos de "victimismo" y "deslealtad". Díaz y Belarra coincidieron hoy en el acto de conmemoración de los 45 años de la Constitución en el Congreso.

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