Sánchez: "No habrá referéndum de autodeterminación. El PSOE no lo aceptará nunca"

MadridSolo un día después de que el presidente del gobierno español se reuniera con el de la Generalitat, Pere Aragonès, en la Moncloa, Pedro Sánchez ha cerrado la puerta a un referéndum pactado en Catalunya. Durante el pleno en el Congreso para dar detalles de la concesión de los indultos –una explicación que ha durado más de media hora–, el líder socialista ha sido tajante sobre el tema. "No habrá referéndum de autodeterminación excepto que quien lo defensa consiga convencer a tres quintas partes de la cámara para modificar el artículo 2 de la Constitución y después lo refrenden los españoles. Y ya les digo yo que el PSOE no lo aceptará nunca", ha dicho de manera clara.

Coincide así con el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, que invitó al independentismo a encontrar sus propias vías legales para un referéndum pactado. La vía socialista es clara: que encuentren unos apoyos que ahora mismo son imposibles en el Congreso, puesto que el independentismo, como mucho con Unidas Podemos, no suma.

Sánchez se despide así este miércoles del Congreso antes de las vacaciones de verano. La comparecencia se produce con el pretexto de dar detalles de los dos últimos Consejos Europeos, marcados por la pandemia y los fondos de recuperación –de hecho, ha anunciado que el 15 de julio se celebrará un nuevo acto de homenaje a las víctimas del coronavirus con Felipe VI–, pero el tema político de fondo es el paso de la Moncloa para intentar resolver el conflicto en Catalunya, al que se oponen el PP, Vox y Ciudadanos con vehemencia con la interposición de recursos al Supremo para dar marcha atrás a los indultos.

En este sentido, Sánchez ha retado al PP a dejar claro que ha roto todos los puentes con el gobierno con la presentación de una moción de censura, como ya hizo Vox el septiembre pasado, o bien sentarse a acordar el desbloqueo de los órganos constitucionales, también del Tribunal de Cuentas –a pesar de que el presidente español no lo ha mencionado, pero desde el martes la Moncloa presiona a los populares para que renueven también el ente de fiscalización.

Parar la judicialización

Y es que el pleno extraordinario llega también después de que el Tribunal de Cuentas impusiera fianzas de hasta 5,4 millones de euros por la acción exterior del Govern entre 2011 y 2017 a los gobiernos de Artur Mas y Carles Puigdemont. La Moncloa ya ha dejado claro que no reformará el Tribunal de Cuentas y lo único que ha subrayado es que la Abogacía del Estado no presentará una demanda para ir a juicio. La derecha mediática lo ha entendido como una cesión, pero el gobierno español no podía hacer otra cosa, puesto que pierde legitimidad en la causa y la única que podría reclamar el dinero presuntamente malgastado es la Generalitat.

Sobre la judicialización, el presidente español ha prometido "actuar por todos los frentes" para recuperar los puentes con Catalunya después de los indultos. "El imperio de la ley siempre se aplicará, esto no cambiará. Pero la vía judicial no sirve por sí sola para garantizar la convivencia. No tenemos que hacer descansar en los tribunales nuestra responsabilidad política", ha dicho.

Finalmente, Sánchez ha cerrado la primera intervención sobre los indultos defendiéndolos para fomentar la "convivencia" y el "reencuentro", a pesar de que ha admitido que no hay "garantías" de éxito hoy por hoy.